Saetas por seguiriyas o por martinete, declamaciones en verso y en prosa, composiciones extremeñas y andaluzas. Los acordes más representativos de la Semana Santa regresaron anoche al casco histórico cacereño de la mano de uno de los primeros actos que anuncian la llegada de la Pasión, el Recital Poético Musical en honor de Jesús Nazareno. La imagen, tallada en 1609 por Tomás de la Huerta, despierta desde hace siglos honda devoción entre los cacereños, por ello fueron muchos los que anoche quisieron arropar con su participación o simplemente con su presencia este prólogo simbólico de la Semana Santa.
El acto tuvo lugar en el templo de Santiago, sede de la cofradía del Nazareno, la más antigua (fundada en 1464) y numerosa de la ciudad (alrededor de 3.000 miembros). La propia banda de cornetas y tambores de esta hermandad actuó en los inicios con dos piezas de composición propia incluidas en su disco --el primero grabado por una banda extremeña--, Jesús de la Pasión y Adarve al alba , seguidas de Penas de Triana y otras clásicas sevillanas. También la Banda Municipal de Música, siempre presente en los cortejos penitenciales cacereños, brindó un repertorio seleccionado para la ocasión.
A continuación, el flamenco se convirtió en oración popular a través de la Escuela de Saetas de la Sagrada Cena. Dos de sus alumnas, Jacinta Martínez y Manoli Delgado, interpretaron varias piezas de la tradición cacereña y andaluza en honor a la imagen. La poesía y la prosa también fueron instrumento de culto al Nazareno mediante las composiciones de José Manuel Martín Cisneros, mayordomo a su vez de la cofradía cacereña de los Ramos, que ha escrito algunas de ellas especialmente para el acto de la pasada noche. "Cinco en punto, madrugada / A las cinco en punto sale / de la iglesia de Santiago / Jesús el señor de Cáceres" , comenzaba uno de sus versos.
La cofradía del Nazareno abre así su propio programa de Cuaresma, en el que destaca especialmente el tradicional besapié del próximo 7 de marzo (acuden habitualmente unas 10.000 personas). Pero la hermandad ya tiene todas sus miradas puestas en el 2009, año del cuarto centenario de la creación de su imagen titular, un aniversario que la cofradía celebrará con un programa específico de actividades y extensivo a toda la ciudadanía.
