El presidente de la Asociación de Vecinos de La Madrila, Miguel Salazar, definió ayer como "cuento chino" el argumento de los hosteleros que defiende que el área de la plaza de Albatros no es zona saturada puesto que la alcaldía debe renovar el decreto cada tres años y no lo hace desde el 2000. Salazar indicó que había consultado con los servicios jurídicos del ayuntamiento y le habían comunicado que La Madrila dejaría de ser zona saturada sólo si los bares desaparecieran.

El responsable vecinal consideró como algo puramente anecdótico la renovación del decreto y dijo que "eso se renueva en 24 horas". El presidente utilizó un tono irónico al asegurar que no le preocupaba si los bares abrían toda la noche o reabrían a las seis de la mañana porque, insistió, "son argumentos para nosotros. Ellos --en referencia a los hosteleros-- lo único que están haciendo es cavándose su propia tumba y a nosotros, a los vecinos, nos respalda el ayuntamiento".