El alcalde, José María Saponi, abrirá hoy el curso político, un periodo en el que se tendrá que resolver la aprobación definitiva de la revisión del plan general municipal y el concurso para la gestión del servicio local de recogida de residuos y limpieza viaria, dos de las cuestiones decisivas de la presente legislatura. Saponi tiene previsto informar hoy de algunos de los objetivos del curso, unos fines que deberá cumplir con un gobierno que desde el pasado mes de junio está en minoría.

La aprobación final del plan general municipal

Tendrá que ser a finales de septiembre, si no se produce un nuevo aplazamiento, cuando el pleno de la corporación local vote la aprobación inicial del plan general municipal (nueva denominación que la Ley del Suelo da a los planes generales de ordenación urbana -PGOU-), un documento que se presentó a los grupos políticos municipales durante el mes de julio y que, aunque no se haya expuesto al público, es ya conocido por muchos de los sectores directamente implicados en el desarrollo urbano de la ciudad.

El inconveniente para el gobierno local es que para aprobarlo inicialmente necesita al menos un voto de uno de los concejales de la oposición. En caso de un empate entre los doce concejales del PP y los doce ediles de PSOE e IU, ya que el concejal independiente, Felipe Vela, ha dejado claro que no votará en contra, aunque sí podría abstenerse, no bastaría con el voto de calidad del alcalde para romper el empate a favor del PP. Es necesaria la mayoría absoluta (13 votos) para la adopción de acuerdos que afectan a la tramitación de los instrumentos del planeamiento general urbanístico.

Debate del presupuesto del ejercicio del 2006

El segundo pleno en importancia que celebre la corporación municipal será a finales de diciembre o principios de enero para la aprobación de los presupuestos del ejercicio 2006, el primero que elaborará Andrés Nevado como edil de Economía.

Las cuentas del año próximo se tendrán que aprobar con un superávit de 2 millones de euros para cubrir el remanente de tesorería negativo con el que se cerró el 2004, medida que para el grupo socialista y Vela es insuficiente al considerar que el desfase económico del municipio es superior, por lo que han reclamado otras soluciones para un desfase que la oposición cifra en varios millones de euros, ocasionado en parte por reconocimientos extrajudiciales de créditos (gastos que se ejecutan sin contar con financiación asignada ni partida presupuestaria) realizados por el gobierno local.

En el resultado de la votación de los presupuestos del ejercicio del 2006 influirá las soluciones que presente el gobierno municipal para atender el desfase. Si no hay ningún acuerdo, el grupo municipal popular se enfrenta a no sacar adelante unas cuentas que, como mínimo, deben tener un superávit de 2 millones, y sería la primera vez que con Saponi de alcalde no se aprobase el presupuesto municipal.

El párking de Marrón y el pabellón, pendientes

Las dos inversiones de mayor importe que el gobierno local presupuestó para este año todavía no se han iniciado, ni siquiera el proceso para su adjudicación. Se trata del párking proyectado en la plaza Marrón, con un coste de 2,2 millones, y el pabellón para ferias y exposiciones, previsto en una de las naves del poblado minero de Aldea Moret. Para esta segunda actuación se prevé como alternativa que pueda financiarse con fondos europeos, y se ha incluido dentro de los proyectos de la iniciativa Interreg presentados en julio por el gobierno local. La realización de estas dos obras deberá aclararse en lo que queda de año. En la misma situación que las dos inversiones anteriores se encuentra el párking proyectado en las traseras de los juzgados y junto a la avenida de la Hispanidad.

Un servicio que mueve más de seis millones

La concesión del servicio municipal de recogida de residuos urbanos y limpieza viaria es con la gestión del abastecimiento de agua el concurso más importante que adjudica el ayuntamiento. El contrato de la recogida de residuos mueve al año más de seis millones de euros, y su adjudicación se resolverá en el presente curso político, ya que a finales de año concluye el contrato que por un periodo de 15 años se adjudicó en 1990 a la empresa cacereña Conyser. Pero antes de resolver este concurso se tendrá que adjudicar el contrato para la gestión del cámping, proceso que ya se ha iniciado y que será una de las primeras decisiones importantes que adopte el gobierno municipal en el curso político que arrancará esta mañana.