Representantes de los tres grupos de música que el pasado lunes fueron desalojados del local de la calle Hernando de Soto en el que ensayan desde hace dos años aprovecharon el pleno de ayer en el ayuntamiento para protagonizar una protesta silenciosa contra el expediente municipal que ordenaba el desalojo del recinto al estimar que los jóvenes no disponen de la correspondiente licencia de apertura.

El alcalde, que primero charló con los chavales unos minutos en el salón de plenos y luego los invitó a su despacho, se comprometió a volver a estudiar ese expediente y a intentar resolver "lo antes posible", dijo, la situación. El alcalde, según confirmaron los representantes de los grupos a la salida de su encuentro con el mandatario, comentó que la orden no se sustenta.

El ayuntamiento explicó ayer en un comunicado que Saponi ha dado instrucciones "para que se les permita a los jóvenes músicos el acceso al local, para que lo puedan seguir utilizando y usando como lugar de ensayo". El alcalde, lo mismo que hizo posteriormente el concejal de Juventud, Javier Castellano, aprovechó para anunciar que la planta baja del edificio Valhondo se abrirá el próximo otoño para que los grupos puedan realizar sus actividades. La obra, ya financiada, está en contratación.

Por su parte, la portavoz del PSOE, Carmen Heras, entendió que la orden de cierre no es correcta y la calificó de exagerada. "Creo que el alcalde intentará buscarles una solución", dijo la concejala. El portavoz de Izquierda Unida, Santiago Pavón, consideró que la denuncia era "una interpretación un tanto libre de la ordenanza" y pidió al ayuntamiento celeridad para terminar las obras en el edificio Valhondo. Los grupos desalojados de Hernando de Soto son Wamtún Frito, CRK y Okamon.