El juzgado de lo penal de Cáceres ha condenado a seis meses de prisión a J. T. P. por un delito de abusos sexuales contra la empleada de una entidad financiera. También, se toma como medida de seguridad el internamiento del condenado en un centro de deshabituación de drogas por un tiempo máximo legal de tres años. Además se le ha impuesto pagar una indemnización de 1000 euros y la prohibición de "comunicar por cualquier medio con la víctima y de aproximarse a una distancia inferior a 50 metros durante dos años", según dicta la sentencia.

Los hechos ocurrieron una tarde de septiembre del 2006 en la calle Argentina. La víctima se disponía a entrar en su trabajo y "habiendo surgido en el acusado un insano deseo sexual", dice la sentencia, "se acercó a ella por la espalda y, de manera tan súbita e inesperada como carente de violencia, le realizó tocamientos en las nalgas, siempre por encima de las ropas", continúa. La víctima empujó al agresor y éste no intentó retenerla ni permaneció en el lugar. Después, cuando la agredida iba con unos clientes por la misma calle, el acusado le hizo comentarios y "gestos procaces sacando la lengua".

Según la sentencia la mujer no presenta secuelas físicas o psíquicas salvo la "incomodidad que suponen las exploraciones e interrogatorios". El acusado tiene reconocida una minusvalía por padecer el síndrome de Tourette, lo que unido a una antigua adicción a las drogas limita de modo importante sus facultades psíquicas.