La Unión de Cofradías Penitenciales de Cáceres ha celebrado este miércoles un pleno telemático para decidir qué actos mantiene y cuáles no, tras el acuerdo adoptado en toda la Provincia Eclesiástica de Extremadura de suspender las procesiones por segundo año consecutivo, así como las celebraciones y actos organizados por parroquias, hermandades, cofradías y asociaciones que tengan carácter de culto externo, es decir, que traspasen los umbrales de los templos en Cuaresma y Semana Santa

Durante este encuentro, en el que han estado presentes los mayordomos de las distintas hermandades, y al que se ha incorporado el administrador diocesano de Coria-Cáceres, Diego Zambrano López, se ha decidido mantener algunos actos muy simbólicos, siempre guardando las medidas de seguridad establecidas en cada momento frente a la pandemia. Así, el 20 de febrero tendrá lugar en Santa María (12.00 horas) la presentación del cartel oficial de la Semana Santa de Cáceres 2021, que este año se corresponde con la obra pictórica titulada ‘Cruz de guía’, realizada con técnica mixta al óleo y bolígrafo sobre tabla por Manuel Pérez Gómez-Pastrana. Se trata del trabajo ganador del concurso que convoca anualmente la unión cofrade, que en esta edición debía versar sobre la cofradía de la Soledad.

También el 20 de febrero, pero a las 20.00 horas, se celebrará en la concatedral el Sermón de las Siete Palabras a cargo del sacerdote Ramón Piñero. Otro acto que se mantiene es el vía crucis de la unión cofrade, que se desarrollará el 20 de marzo a las 20.00 horas en Santa María. Presidirá los cultos la cruz guía de la cofradía de los Ramos por su 75 aniversario.

En cambio, sí se aplaza hasta 2022 la presentación de la Semana Santa de Cáceres en Segovia, la Asamblea Diocesana de Hermandades y Cofradías, la Pasión Viviente, el Premio Cope Juventud Cofrade y el pregón de apertura de la Semana Santa cacereña, a cargo de Ignacio Sellers, veterano cofrade que colabora en distintas hermandades.

Tampoco habrá guía oficial de la Semana Santa al no celebrarse las procesiones, pero sí un documento con toda la información de los cultos previstos, en los que deberán guardarse los aforos y las medidas que correspondan.