El Servicio Extremeño de Salud (SES) desmantela el área de Cirugía Vascular y Angiología del hospital Universitario de Cáceres y despide a dos de los facultativos que trabajaban en esta planta. En una resolución con fecha 31 de enero, a la que ha tenido acceso este diario, advierte además que se van a amortizar las plazas de estos especialistas despedidos, es decir, que va a suprimir sus vacantes, por lo que todo apunta a que el cierre será definitivo.

Se ha cesado a los dos cirujanos que prestaban sus servicios en calidad de interinos, a los otros dos, que son funcionarios de carrera, les ha modificado sus condiciones de trabajo con el objetivo de trasladarlos a Badajoz para que presten allí sus servicios. Estos dos últimos pasarán a formar parte del nuevo servicio de Cirugía Vascular de referencia regional y que estará ubicado en la capital pacense. La creación de este área fue la decisión que tomó el SES ante la situación que había en Cáceres. Lo anunció la semana pasada el consejero de Sanidad, José María Vergeles, pero entonces no confirmó que este cierre sería definitivo.

Pacientes y afectados creen que estos últimos movimientos (despidos, amortización de plazas y traslados de personal) pretenden quitar para siempre este servicio. El SES no lo aclara. Preguntado ayer por este asunto se limitó a decir que «todas las actuaciones que se llevan a cabo en el servicio de Cirugía Vascular del complejo hospitalario Universitario de Cáceres están relacionadas con el interés del Servicio Extremeño de Salud de ofrecer una atención de calidad y de seguridad a los usuarios».

En esa resolución, que firma el director gerente del SES, Ceciliano Franco, se justifica esta decisión porque se han «agotado todas las medidas que están a nuestro alcance». Cabe recordar que en el mes de julio se suprimieron las intervenciones quirúrgicas y las urgencias debido a la baja médica de dos de los cirujanos y desde octubre tampoco se pasa consulta porque los otros dos especialistas de plantilla también estaban en situación de incapacidad temporal. Ante esta situación el SES estaba buscando facultativos en todo el país para poder solucionar el problema, pero de momento no había ninguno disponible. Con la decisión del cierre del servicio y de su traslado a Badajoz ha abandonado esta búsqueda.

DESPRESTIGIO DEL ÁREA / El documento hace referencia a un informe que elaboró la dirección de asistencia sanitaria sobre este servicio, en el que se advertía de que la situación que se daba con los cuatro cirujanos de baja no cumplía con los «criterios de seguridad» y de la existencia de numerosas reclamaciones» tanto de pacientes como de la Defensora de los Usuarios. También destaca que el servicio «está desprestigiado entre la población», que la estancia hospitalaria era superior a la media de otros servicios de esta especialidad, que el número de complicaciones pre y postoperatorias era elevado y que «no existe colaboración con otros servicios del complejo hospitalario por falta de credibilidad».

Los afectados continúan recogiendo firmas para exigir su reapertura. A través de la plataforma ‘Peticiones.es’ han conseguido casi 500 y en los próximos días instalarán mesas para recoger más en Cánovas y en la plaza Mayor. Animan además a asistir a la concentración del 21 de febrero ante la gerencia del SES (a las 12.00 horas) donde se reivindicará también la recuperación de este servicio.