"No se trata de que los comerciantes no queramos adelantar las rebajas, sencillamente es que no podemos. Si no vendemos con un margen, el negocio no subsiste, ya hemos pagado los artículos al proveedor y no es posible perder desde el primer día". Así lo explica Mercedes Serrano, propietaria de las tiendas October (avenida de Alemania) y El Diván del Ratoncito Pérez (Centro Comercial Ruta de la Plata).

Como otros muchos empresarios, Mercedes ha aguantado los años de crisis ajustando al máximo los costes de su negocio y exprimiendo su propio esfuerzo personal. "Es la única forma de seguir, sobre todo porque Cáceres tardará en recuperarse. Solo hay que ver las colas en las tiendas de otras ciudades y la situación de nuestro comercio. No acabamos de arranca, basta con mirar la cantidad de locales vacíos", lamenta.

Sin embargo, la empresaria comienza a percibir cierta mejora respecto al año pasado. "Yo lo achaco directamente a la reducción de gastos que hemos hecho en nuestras tiendas, no a la subida de las ventas, pero ojalá que el panorama cambie, es necesario", afirma. También llama la atención sobre las aperturas de las grandes superficies un domingo al mes en 2014, que obligará a hacer lo propio al pequeño comercio. "Serán diez horas consumiendo electricidad y gastos de personal, para no vender. Me temo que nos perjudicará", subraya.