Los vecinos de la ronda de San Francisco temen que el próximo otoño el agua de lluvia vuelva a inundar sus bajos. Lo hizo con los últimos aguaceros y, aunque el ayuntamiento ha llevado a cabo una obra para mejorar la red de saneamiento, creen que esta medida no será suficiente. "Hasta que llueva no sabremos si la solución es definitiva", coinciden en señalar los vecinos.

Un atasco en la canalización en la confluencia de la avenida de la Hispanidad y la Ronda de San Francisco provocaba que el agua aflorara por los sumideros de la calle con las lluvias. Precisamente ese atasco es el que se ha eliminado con la obra finalizada en la mañana de ayer, que también ha traído algún que otro quebradero de cabeza por los fuertes olores que la misma desprendía. Aún así, los vecinos no están muy convencidos de que la solución vaya a ser definitiva.

Florencio Reyes, dueño de dos locales en la zona, lleva un par de años dirigiéndose al ayuntamiento para intentar resolver este asunto, sin obtener respuesta. Sus naves se inundaban y la humedad ha hecho estragos en el suelo y las paredes, llenas de manchas y desconchones. Después de la obra que el ayuntamiento ha llevado a cabo para solucionar la situación, desconfía: "tiene que llover para saber si se arreglará", aseguraba ayer. Para él, la solución definitiva sería conectar las tuberías de cada casa o local a la red de saneamiento principal (situada en la avenida de la Hispanidad) porque, según contó, "tiene más capacidad".

"Cada vez que llueve saco el coche del garaje por si el agua lo daña", afirmaba otro afectado, Telesforo Martín. Para él, lo idóneo sería "darle una buena salida al agua que proviene de la lluvia, que se mezcla con agua sucia". No obstante, su opinión, como la de la mayoría de los vecinos, es que esta medida "no es suficiente", puesto que, continúa, "está recién hecha y no se sabe cómo funcionará. Habrá que esperar a que llueva para poder comprobarlo", dice.

Martín asegura que las obras no se han iniciado hasta que un grupo de vecinos trasladaron la queja a la alcaldesa, Carmen Heras y el edil de Infraestructuras, Miguel López.

Por su parte, el concejal defendió que desde el consistorio se ha hecho todo lo posible para paliar la situación. "Hemos hecho lo que teníamos que hacer", sentenció Miguel López, que aclaró que el problema provenía de una tubería de saneamiento que "ya se ha localizado y reparado".

En cuanto a los daños que la lluvia ocasiona en las viviendas, explicó que el ayuntamiento "solo está obligado a hacerse cargo de la red pública que recoge el agua de la acometida general".