La situación comienza a estabilizarse en Cáceres. Al menos es lo que se intuye de las cifras facilitadas por Salud Pública en la última semana. El indicador que lleva a los especialistas a pensar que Cáceres ya ha alcanzado el pico de esta ola es el número de ingresos que, a pesar de seguir siendo elevado, se ha mantenido en torno al centenar en la última semana (ayer había 105). Esto ha llevado a la gerencia del área de salud a tomar la decisión de cerrar la octava planta del hospital San Pedro de Alcántara para pacientes covid; sigue abierta, eso sí, para enfermos de Neumología y Cardiología que no están infectados de coronavirus.

Han bajado también los nuevos casos. Ayer se notificaron en la ciudad 78; 184 en el área de salud. Aunque la incidencia desciende de forma lenta. Se sitúa en 892 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días y en 389 a una semana.

La octava planta, vacía desde que se abrió el nuevo hospital y se reorganizaron los servicios, ha servido de desahogo en esta pandemia para el San Pedro de Alcántara; su puesta en funcionamiento es de hecho una de las primeras medidas que contempla el protocolo. En cambio, este espacio solo fue suficiente en la segunda ola, cuando no fue necesaria la utilización del hospital Nuestra Señora de la Montaña. No ha sido así en esta tercera oleada ni lo fue en la primera, cuando el elevado número de ingresos ha desborado el San Pedro de Alcántara, lo que ha obligado a reabrir Provincial.

Así, en la capital cacereña están dedicadas ahora mismo para pacientes de coronavirus cuatro espacios: la primera planta, la segunda y Geriatría en el hospital San Pedro de Alcántara, y la segunda planta del Nuestra Señora de la Montaña. Ayer en el primer centro hospitalario había 93 enfermos y en el Provincial, 12. Los pacientes más graves y con peor pronóstico se mantienen en el San Pedro de Alcántara y al Nuestra Señora de la Montaña solo se trasladan los que presentan una mejoría y su enfermedad se ha estabilizado, por lo que se prevé que no vayan a requerir un ingreso ni en la Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios (UCRI) ni en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Esto es así porque en este hospital no se prestan ninguno de estos dos servicios.

Hoy hace justo diez días que reabrió el hospital Provincial, aunque en ningún momento se han llegado a ocupar las camas que se habían habilitado. Están preparadas 20 (con disponibilidad de llegar hasta 49) y el máximo de pacientes que ha tenido han sido 12 (los que había ayer). Se mantendrá abierto al menos hasta que termine esta tercera ola y de momento solo recibirá a enfermos del área de salud de Cáceres, de Coria o de Navalmoral de la Mata (el protocolo incluye que los pacientes de estas dos áreas puedan ser trasladados a Cáceres porque es el centro de referencia del coronavirus en la provincia).

Preocupa, no obstante, el aumento de ingresos en UCI, que ha llevado a poner en funcionamiento para covid la unidad del hospital Universitario. Hasta hace una semana había sido suficiente con la del San Pedro de Alcántara, que tiene 12 puestos. En cambio ayer había en esta unidad de agudos 14 personas hospitalizadas, lo que ha obligado a trasladar al Universitario a dos de ellas. La situación preocupa porque, si se colapsa la UCI, habría que parar la actividad asistencial no relacionada con el coronavirus, como ya ocurriera en la primera ola. Hasta el momento no ha sido necesario pero, de aumentar los ingresos en esta unidad, habría al menos que ralentizar los quirófanos.