"Si no es legal, si no hay licencia, entiendo que las autoridades deban intervenir, me parece lógico, pero yo no tengo nada que ver con ese tema, yo solo he alquilado mi terreno y daba por supuesto que la empresa contaba con todos los permisos". Así se expresó ayer Marcelino Martín, arrendador del solar donde se ha levantado la torreta y responsable de la Cristalería Glass, que ayer apareció con daños en las puertas. "Yo mismo me he informado en Industria y he hablado con médicos sobre las antenas, y todos están de acuerdo en que no hay riesgos", explicó, lamentando que algunos vecinos le hayan llegado a inutilizar tres cerraduras, por lo que tuvo que llamar ayer a un herrero.

"Estoy hablando con la gente, dando las pocas explicaciones que puedo dar, porque tengo buena relación con la mayoría. También me encuentro localizado todo el tiempo, el ayuntamiento tiene mis datos", afirmó. Finalmente negó que su publicidad intente ocultar la antena. "Es solo una deferencia de la compañía, eso no se puede esconder", matizó.