La noche del pasado sábado confirmó que la fórmula Spanglis funciona. El público llenó el Corral de las Cigüeñas en el último concierto de los cuatro que ha ofrecido el festival Extremeña Sonora durante el fin de semana. Durante casi dos horas, David Pino y los suyos hicieron disfrutar a los espectadores con temas de la movida de los 80 y clásicos extranjeros de los 70. Inolvidables los momentos al ritmo de versiones como Love is in the air , del australiano John Paul Young, Chica de ayer , de Antonio Vega, Insurrección , de Manolo García.

El grupo cacereño, que tiene ya una parroquia fiel que mezcla edades, cumplió con creces a pesar de las dificultades de su vocalista por superar unos inoportunos problemas de garganta. El guitarrista Manolo Gómez se encargó de arropar a Pino hasta el final de un concierto que volvió a confirmar que hay demanda de sobra para que Cáceres tenga música en directo el resto del año. Hasta la consejera de Cultura, Leonor Flores, como una espectadora más, disfrutó de la velada. Y es que la noche, de primavera, invitaba a la diversión.

Aunque los siete músicos de Spanglish demostraron que tienen cuerda para rato, queda pendiente escucharles todavía con temas propios. Han sabido mezclar bien veteranía y juventud. La última incorporación del saxofonista David Martín lo demuestra. Chanclón (teclados), Carricajo (guitarra "siniestra" como le llaman sus compañeros), Nono (batería) y García (bajo) se encargan del resto. De nuevo, el Corral de las Cigüeñas volvió a ser un talismán para estos soñadores de la época dorada del pop español y extranjero.