Tubos de obra, ropa abandonada, zapatillas, restos de muebles, pintadas en bancos y paredes, fuentes estropeadas y ni una sombra. Ese es el aspecto que presenta el parque de la calle Gonzalo Mingo, en la barriada de Mejostilla. Se trata de uno de los más grandes de la zona y el más frecuentado por los vecinos, pero, a pesar de ello, las condiciones en las que se encuentra no corresponden a las de una zona de ocio infantil. Los vecinos ya han protestado en varias ocasiones por esta situación, que se remonta a hace más de cinco años. "Lo hemos pedido varias veces tanto al gobierno anterior como a este. Siempre nos dicen que se arreglará, pero nada", se quejó el presidente de la asociación vecinal, Jacinto Mellado.

El estado de las fuentes es el que más preocupa. Se trata de dos grandes infraestructuras, que podrían compararse en tamaño al de Fuente Luminosa, sin embargo para nada lucen como esta última. Desde la construcción del parque nunca han llegado a funcionar porque el sistema eléctrico está estropeado. Eso sí, agua tienen desde el principio, pero agua estancada y sucia que desprende un olor desagradable, sobre todo en verano. Su fondo se encuentra cubierto de piedras porque su abandono ha servido para que los niños se entretengan tirando cantos en su interior a modo de juego --las fuentes están rodeadas por pequeñas piedras--.

CON PIEDRAS Todo ello ha influido para que en más de una ocasión los vecinos se encontraran peces y ranas muertas flotando en el agua. "El parque estaría precioso si funcionaran las fuentes. Además servirían para refrescar el ambiente en verano, pero nunca las hemos visto activas. Están estropeadas", explicó el presidente vecinal.

El parque se construyó hace casi cinco años entre el Residencial Ronda y el Sector 3 de Mejostilla y ocupa una superficie de más de 12.000 metros cuadrados pero desde entonces no se han plantado árboles. Los vecinos del barrio protestan porque en toda la explanada no hay apenas sombra y los días de sol no pueden disfrutar del parque porque el sol pega con fuerza. Exigen que se planten otras especies que crezcan más rápido y proporcionen más sombra porque los pocos que ahora existen son demasiado pequeños.

A todo lo anterior se une ahora la suciedad acumulada en el césped que rodea todo el parque, que se ha convertido en un improvisado baño para los animales y espacio de objetos perdidos. Los excrementos de animales son comunes a cada paso, pero además se pueden encontrar desde grandes tubos de obra hasta zapatillas, restos de muebles, sofás, botellas y bolsas de basura, una imagen que deteriora el parque desde hace ya varios meses. "Necesitamos una limpieza, el problema es que el personal asignado para la limpieza de los parques es insuficiente. El centro del parque se mantiene más o menos, pero las zonas de alrededor están sucias", dijo el representante del colectivo vecinal, Jacinto Mellado.

MANTENIMIENTO El de la calle Gonzalo Mingo no es el único parque descuidado de la zona de Mejostilla. En situación parecida se encuentran el de Cayetano Polo Polito, Ceres o el de 8 de marzo. "Llevamos años demandando que mantengan estas zonas pero siempre están igual. No es algo que venga de ahora, es de siempre", se quejó el presidente de la asociación de vecinos.

césped que rodea todo el parque, que se ha convertido en un improvisado baño para los animales y espacio de objetos perdidos. Los excrementos de animales son comunes a cada paso, pero además se pueden encontrar desde grandes tubos de obra hasta zapatillas, restos de muebles, sofás, botellas y bolsas de basura, una imagen que deteriora el parque desde hace ya varios meses. "Necesitamos una limpieza, el problema es que el personal asignado para la limpieza de los parques es insuficiente. El centro del parque se mantiene más o menos, pero las zonas de alrededor están sucias", dijo el representante del colectivo vecinal, Jacinto Mellado.

MANTENIMIENTO El de la calle Gonzalo Mingo no es el único parque descuidado de la zona de Mejostilla. En situación parecida se encuentran el de Cayetano Polo Polito, Ceres o el de 8 de marzo. "Llevamos años demandando que mantengan estas zonas pero siempre están igual. No es algo que venga de ahora, es de siempre", se quejó el presidente de la asociación de vecinos.