La Jefatura Provincial de Tráfico estima que las presuntas irregularidades detectadas podrían haberse practicado desde hace algunos años, "aunque no se puede precisar cuántos, quizás tres o cuatro, ya se conocerá con exactitud", declaró ayer el responsable del organismo, Ramón Ledesma, basándose en las investigaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil. En cualquier caso, el jefe de Tráfico se mostró muy cauto y recordó que existe un proceso abierto: "El juzgado determinará qué ha ocurrido, cómo y quién puede estar implicado", matizó.

Ledesma apenas lleva unas semanas en su cargo, pero asegura que fue puesto al corriente de las investigaciones cuando llegó a Cáceres. "Hace tiempo se detectaron ciertas prácticas, por lo que el anterior jefe de Tráfico, Antonio Carrasco, dio parte a la Guardia Civil un año atrás", relató ayer. Las detenciones se produjeron el jueves. El jefe de Sanciones, J. C. V., fue arrestado en su domicilio y seguidamente los agentes acudieron a su despacho. "Registraron cajones y armarios, y se llevaron el equipo informático", recuerda Ledesma.

El responsable de la sección de Seguridad Vial, F. N., fichó por la mañana en la jefatura y se marchó de viaje a Toledo, donde fue arrestado por agentes de la Policía Judicial. M. L., funcionaria de la escala de conductores subalternos, también fue detenida en su domicilio. Los dos últimos salieron en libertad tras pasar una noche en la comandancia, "y ya se han incorporado a su trabajo", explica Ledesma. J. C. V. está ingresado en prisión.

"Las irregularidades afectan al procedimiento administrativo sancionador, con falsificaciones de sellos, alegaciones, recursos, sobreseimientos y falsa numeración de expedientes. En definitiva, existía un presunto aprovechamiento de los conocimientos legales para manipular el proceso de sanciones y conseguir absoluciones ante las alegaciones", explica Ledesma. El jefe de Tráfico no pudo precisar ayer cuántos usuarios se han beneficiado de esta presunta práctica, que lograba absolverlos de pagar las multas. Tampoco pudo determinar si existía lucro por parte de los funcionarios, pero sí reveló que podría haber ciudadanos implicados, "aunque esto compete a la investigación", subrayó.

SUSPICACIAS Ledesma también desveló ayer que el ambiente de la jefatura "es un poco tenso, puesto que estos sucesos generan suspicacias y malestar". No obstante, manifestó su deseo de que todo se solucione "lo antes posible", y pidió "cautela y prudencia en las declaraciones hasta que el juez se pronuncie".