Los costes del ciclo integral del agua (tratamiento y depuración) se incrementarán en unas semanas, cuando comience la nueva concesión de este servicio. Este aumento conllevará una subida de la tasa del agua y alcantarillado que cada dos meses abona el usuario. El porcentaje del incremento de la tarifa depende de la decisión que en las próximas semanas tome el equipo de gobierno, que puede acordar que la tasa asuma todos los nuevos costes del servicio, lo que significará incrementos que serían superiores al 40%, o no repercutir parte de los costes, pagándolos con otros ingresos. Aunque sea por una vía directa (la tasa) o indirecta (con otras partidas), todo saldrá de los presupuestos municipales.

El incremento de la tasa, que necesita de una variación de las ordenanzas, de exposición pública y de resolución de las alegaciones que se presenten, será la primera decisión de peso que debe afrontar el equipo de gobierno a la vuelta de las vacaciones.

Además es una decisión que no debe retrasarse. El pliego de las condiciones del concurso del agua, que viene a ser el contrato de la concesión, precisa que esta variación de las tasas debe estar al principio de la concesión para garantizar el equilibrio financiero (costes/ingresos) de la misma.

No obstante, el proceso de la modificación de las ordenanzas fiscales se puede prolongar varios meses (comisión, pleno, exposición al público, alegaciones, resolución de las reclamaciones, pleno...), mientras que un retraso en la nueva concesión significa que se tarda más en cobrar el canon del agua, que el consistorio espera para, además de atender deuda, amortizar y cancelar seis operaciones de crédito que tienen todavía un capital vivo de unos 20 millones de euros.

Por eso se podría dar el caso de que el gobierno intente la firma del contrato con Acciona, la nueva concesionaria del servicio del ciclo integral del agua, antes de la entrada en vigor de la nueva ordenanza fiscal. Para esto el gobierno se tendría que comprometer a garantizar el pago de la diferencia entre lo que se recaude con la tasa antigua y los costes que tenga el servicio.

Desde el gobierno municipal solo se precisó ayer que se está trabajando en la variación de la ordenanza fiscal con el propósito de que tenga "la menor repercusión posible" y el incremento no llegue a los porcentajes del estudio económico de la concesión, que preveía subidas de un 60%. Además en los próximos días la alcaldesa, Elena Nevado, se reunirá con sus homólogos de Sierra de Fuentes y de Malpartida, municipios a los que también afecta la nueva concesión.

Equilibrio financiero, costes, ingresos, agua facturada y agua tratada

Lo normal es que la tasa de un servicio lo financie, al menos esa es la teoría. Lo que ocurre es que para evitar que los precios se disparen, la administración intenta asumir la diferencia entre ingresos y costes por otra vía.

En este servicio hay que diferenciar entre el agua que se trata (que es por la que paga el ayuntamiento a la empresa concesionaria del servicio) y el agua facturada (que es la que pagan los usuarios). La segunda es inferior a causa de las perdidas de la red, autoconsumo municipal, exenciones... El agua que se trató durante el 2010, según los cálculos del estudio económico de la concesión, fue de 11,3 millones de metros cúbicos, mientras que la facturada se quedó en 7,3. Se prevé que las diferencias se acorten con la mejora de la red.

Según el estudio, los costes en el 2010 fueron de 9,7 millones de euros, mientras que los ingresos de 2009 quedaron en 7,9 (aquí no están las cantidades por derecho de enganche o contadores). Es decir, ya se parte de un déficit entre costes e ingresos.

Canon, inversiones y la energía inciden en que los costes sean superiores

El estudio económico del concurso calculaba que los costes del servicio del ciclo integral (tratamiento y la depuración del agua) en 2010 ascendían a 9.717.165 euros (se trataba de una estimación dado que se elaboró a mediados del pasado año, ya que el concurso ha tardado once meses en adjudicarse). El coste del servicio en 2012 puede ascender a 12.305.820 euros, un 25% más. (Esta cantidad saldría de la previsión de metros cúbicos que la empresa trataría en base a los datos que recoge el estudio y del precio propuesto por Acciona en su oferta -1,123 euros por metro cúbico, que es lo que le paga el ayuntamiento-).

El incremento de costes en el servicio se debe principalmente al canon del agua, que la empresa aporta al ayuntamiento, pero que después se tiene que devolver, con los intereses correspondientes, durante los 24 años de la concesión. Además está la repercusión de las nuevas infraestructuras que se tienen que acometer con cargo a la concesión.

Las cifras definitivas sobre el incremento de los costes dependen del contenido de la oferta de Acciona. No obstante, según datos de la intervención local, la empresa calculaba para el primer año de la concesión costes de 12,3 millones y el precio que el ayuntamiento tendría que pagarle por cada metro cúbico que tratase sería de 1,128 euros.

El consistorio se encontraría en unas semanas con unos costes que se incrementarían de un día para otro al menos en un 25%, frente a esto tendría una tasa que no llega ni para el pago de los costes actuales y que no se ha revisado desde mayo de 2005.

El canon y las obras serían los nuevos costes, pero los principales costes del servicio seguirían siendo personal y la energía, que ha sido lo que más se ha incrementado en los últimos años.

Por su parte el canon tiene dos cantidades: 30,2 millones que se dan al consistorio al inicio de la concesión y que repercuten en la tasa y 7,5 de exceso de canon que no se tienen que devolver.

La subida de los ingresos de la tasa para atender a los gastos del servicio

Si se toma como base que Acciona va a cobrar 1,123 euros por metro cúbico (mil litros) tratado, los costes del servicio en 2012 serían de 12,3 millones de euros. Por su parte los ingresos por la tasa ascenderían a 8,1 millones (cálculo que sale del incremento de recibos que prevé el estudio económico de la concesión y partiendo de que los consumos no sufren cambios, aunque no están contemplados los ingresos por derechos de enganche y contadores, que podrían aumentar la recaudación).

Con estas previsiones los ingresos de la tasa se tendrían que aumentar entre un 45 y un 50% para que sufragasen los costes. La tarifa que abona el usuario subiría en esos porcentajes.

Incremento de entre 4 y 5 euros al mes por la tasa de agua y alcantarillado

El mayor consumo entre usuarios se da en el tramo que está entre los 5 y los 20 metros cúbicos en viviendas. Al ser el recibo cada dos meses, un usuario medio pagaría por agua y alcantarillado 20,44 euros al bimestre. Con un incremento en la tarifa de entre el 40% y el 50% se pagarían al mes 4 o 5 euros más.

Cuando se tramitaba la adjudicación del concurso se llegó a presentar una propuesta de nueva tarifa, aunque al final se retiró y ni siquiera se llegó a debatir. Con dicha propuesta por un consumo medio de 20 metros cúbicos se pagarían 34,8 euros al bimestre por el agua y el alcantarillado, un 70% más que con la tarifa que está en vigor.

En el estudio económico de la concesión se calculaba un incremento de la tasa en torno a un 60%. No obstante entre los criterios que se introdujeron para la valoración de las ofertas se puntuaba a las propuestas que ofreciesen costes menores para rebajar algo este porcentaje de subida. Las empresas se acogieron a esta posibilidad que daba puntos para decidir la adjudicación.

Las distintas posibilidades de la tasa y nuevos factores como Portaje

La tarifa del agua de Cáceres tiene distintos conceptos. Primero se diferencia entre gastos en viviendas (que pagan menos) y los consumos en locales y empresas. Después se establece una bonificación para los consumos menores de 5 metros cúbicos al bimestre, que son los que menos pagan por cada mil litros consumidos. Y por último se establecen coeficientes disuasorios que gravan gastos superiores a los 20 metros cúbicos por bimestre.

Ahora el ayuntamiento tendrá que decidir cómo modifica la tasa: si es una subida lineal o por tramos (gravando más los consumos mayores y bonificando a los que gasten menos).

El incremento de la tasa por la nueva concesión no tendría en cuenta la repercusión del nuevo abastecimiento desde Portaje, que tendría una incidencia en los costes. La nueva conducción estaría operativa en 2012 o 2013.