Los taxistas cacereños llevan ocho meses esperando a que el ayuntamiento responda a la solicitud de subvención para instalar GPS en sus vehículos. El proyecto, que prevé implantar este sistema de localización permanente en las 72 licencias que operan en la ciudad, fue presentado en noviembre del año pasado al gobierno local del PP y estudiado en la Comisión Municipal de Tráfico del 12 de diciembre.

En su petición, el colectivo de conductores solicitó una ayuda económica de 63.000 euros al ayuntamiento para costear el total de 180.000 a que asciende la instalación de los dispositivos. En esa reunión se acordó solicitar un dictamen jurídico a los servicios técnicos municipales para determinar la conveniencia o no --y en su caso el cauce más adecuado-- de conceder la ayuda.

Sin embargo, Pedro García Muriel, presidente de Radio Taxi, confirmó a este diario que aún no han recibido respuesta alguna del consistorio a esta propuesta y adelantó que tiene previsto mantener un encuentro con la alcaldesa Carmen Heras y el concejal de Tráfico para exponerles su contenido. Este portavoz quiso también destacar que Heras conoce bien cómo funciona el servicio en la ciudad ya que sigue siendo usuaria a pesar de disponer de coche oficial.

Este sistema, del que Cáceres sería pionero en la región, está basado en la informatización de la central de llamadas y en la instalación de terminales de GPS en los taxis para conocer siempre su situación exacta. De esta forma, mejora el servicio a los usuarios ya que se pueden atender las demandas de los ciudadanos de forma más rápida al conocer el lugar exacto donde se encuentran los taxis. Además, incrementa la seguridad de los conductores porque el sistema dispone de comunicación directa con la central de alarmas, que conoce en cada momento la localización en la que se encuentra el taxista en caso de un accidente o un atraco.

TODAS LAS VENTAJAS García Muriel hizo hincapié en las mejoras que supondría este sistema para la flota, que vería reducido también el gasto en combustible "al no hacer tantos kilómetros" y por la "eficacia" al poder acudir con más rapidez a los avisos recibidos a través del dispositivo. Pero, entre otras ventajas, opinó que también redundaría en una mayor seguridad para los conductores porque, pulsando un botón del sistema, podría dar aviso al 112 por una emergencia.

Implantado con éxito en otras ciudades españolas, el GPS fue una de las soluciones propuestas por los taxistas de Bilbao tras el asesinato a apuñaladas de un compañero. Desde diciembre del 2005, los trabajadores del sector disponen en sus coches de un terminal para alertar de atracos junto a la instalación de mamparas. También les ha permitido descongestionar las centralitas, agilizando los tiempos de espera de las llamadas ya que, una vez atendidas, la confirmación del servicio es inmediata porque la operadora y el taxista se comunican apretando simplemente dos botones. Además, el vehículo enviado por el sistema informático es siempre el que más cerca se encuentra del punto de recogida. Con ello se evita también la picaresca de otros profesionales, que decían estar cerca de ese lugar y se encontraban más lejos que otros compañeros.

Otro de los cambios más visibles es la ausencia de avisos de voz en la emisora. Mediante este dispositivo, la comunicación funciona con mensajes de texto y avisos acústicos. La operadora y el conductor intercambian órdenes mediante teclas. En el caso de Bilbao, la sala de operadoras dispone de una pantalla gigante con el callejero y la situación exacta en la ciudad de cada vehículo de la flota. Varios colores identifican el estado del servicio: si está ocupado, libre, en camino o llegando al destino.