Julio ha entrado en su segunda mitad y no hay pista de verano, ni fecha para su apertura. No pudo ser el pasado viernes porque el consistorio ha detectado deficiencias que ahora hay que subsanar. No obstante, Prinsa mantiene su propósito de abrir la pista de La Cañada, y de conseguirlo sería la única. Esta empresa ha hecho una inversión que superará los 60.000 euros, aunque su administrador, Raúl Salgado, no ve mucha voluntad por parte del ayuntamiento. "A lo mejor en otoño sí se llega a abrir", ironizó Salgado la noche del viernes, minutos después de conocer que el consistorio no autorizaba la apertura prevista por los promotores para ese día. "Se abrirá cumpliendo lo que se pide -añadió-, y espero que las condiciones sean iguales para todos".

El ayuntamiento está dispuesto a conceder el permiso definitivo, siempre que la pista se ajuste a todos los requisitos de infraestructura, seguridad, vigilancia, ruidos, horarios y otros. Las principales deficiencias vistas en la inspección hecha el pasado viernes por la mañana afectan, principalmente, a infraestructuras.

Frente al promotor y la disposición del ayuntamiento de permitir la pista están los vecinos de La Cañada, que, además de la preocupación por el ruido, apoyan su oposición en que se incumple la normativa urbanística recogida en el plan general en su regulación para el suelo que es no urbanizable, donde, salvo que se estimen de interés social, no entran edificios o instalaciones para utilidades vinculadas al ocio. La asociación vecinal ha impugnado el permiso provisional dado por el ayuntamiento para la pista.

No obstante, la mayor parte del recinto de la antigua piscina y terrenos adyacentes aparecen en el plan general entre las unidades a desarrollar dentro del suelo urbano, y con un fin y usos permitidos para espacios libres y para la implantación de equipamientos. En suelo urbano sí entran instalaciones relacionadas con el ocio.

Mientras se tramita la autorización definitiva de un expediente que no pasó por la junta local de gobierno hasta el 12 de junio, cuando faltaban pocos días para el inicio del verano, de momento no hay otras opciones para la noche.