Al juicio, que se inició ayer y continuará hoy, están llamados a declarar numerosos testigos --solo por el Ministerio Fiscal están citados 60--, la mayoría de ellos personas que figuran en los expedientes de regulación, bien como extranjeros demandantes de legalización, bien como personas dispuestas a emplearles para conseguirlo. La mayoría de los que declararon ayer dijeron conocer solo a los acusados Luis C. y José Manuel S.

De los que ya se ha llamado a declarar, algunos no comparecieron, como dos marroquís que en su día afirmaron haber pagado 200 euros a Luis C. por hacerles sus papeles, o dos cacereños que firmaron como empleadores y en cuya declaración en comisaría, que se leyó, acusaban a Luis C. de haberles dicho que la firma no era necesaria, que ya firmaría él.

Otros sí dijeron que firmaron como empleadores, pero también que no recordaban sí se les explicó bien para qué era; otros, como una súbdita rumana, aseguró haber pagado a José Manuel 1.000 euros; y hubo incluso quien varió su declaración. Entre estos destacó la de una súbdita marroquí que llegó a asegurar que si en su día dijo que había pagado 750 euros por sus papeles y que Luis y Constancio le dijeron que no se preocupara por el resto porque podían perdonárselo a cambio de relaciones sexuales fue "porque la policía me dijo que o decía esto o me devolvían a Marruecos".