El proceso de consultas que la ley establece para concretar la extinción de los contratos de los trabajadores de la fábrica de cerámicas Waechtersbach concluyó ayer sin que se haya alcanzado acuerdo. Los administradores judiciales apoyan la extinción y los trabajadores se oponen, por lo que habrá de ser el juez del Juzgado de lo Mercantil quien resuelva una vez recabada la oportuna información tanto de los administradores como de la autoridad laboral, lo que se estima será después de Reyes.
Así lo indicaron ayer a EL PERIODICO los miembros del comité de empresa de la fábrica tras la última reunión que para tratar este asunto se celebró a las 09.00 horas en el juzgado.
Los administradores insisten en que dada la situación de la fábrica "la extinción de los contratos es inevitable", pero algunos trabajadores consideran que con un buen plan de viabilidad "es posible su continuidad". Para realizar el plan de viabilidad, indicó María José García, "hemos solicitado al juez que nos facilite una serie de datos de la fábrica, como clientes, proveedores..., pero nos ha indicado que esta información no corresponde darla a él, sino al propietario, algo que vemos difícil conseguir".
