Las dificultades para conseguir en sus países de origen la documentación necesaria se convierte en el principal obstáculo de los aspirantes a regularizar su situación en España. El plazo de tres meses marcado por el Gobierno también supondrá, según sindicatos y colectivos de apoyo, un inconveniente en el proceso.

La imposibilidad física de estar en el país de origen da lugar a otra traba porque los extranjeros tienen que encargar a familiares y amigos esa tarea burocrática. CCOO pidió ayer que también se mejore la atención que prestan los consulados a las personas que hayan solicitado la documentación necesaria para la regularización.