El servicio de transporte urbano de viajeros cerró el 2012 con un déficit de 4,5 millones, incluido el IVA del 10%, resultado que está en la línea del año anterior, en el que también se sobrepasaron los 4 millones, y que dobla las pérdidas registradas en el 2000, el primer ejercicio completo de la nueva concesión, cuando el déficit del servicio se quedó por debajo de los 2 millones.

El descenso en la cifra de usuarios, el incremento del precio de los carburantes y el aumento del IVA que se aplica al transporte de viajeros, que ha pasado del 8 al 10%, influyen en este déficit y en que las dos medidas planteadas por el gobierno local durante 2012 para recortarlo no lo hayan rebajado, no obstante una de las decisiones, la subida de la tarifa (billete, bonobús y tarjeta), no entró en vigor hasta el pasado 1 de noviembre.

A estas dos medidas se suma ahora otro recorte en las líneas, que probablemente se aprobará en la junta de gobierno de esta mañana y que entrará en vigor en febrero, ajuste con el que se pretende un ahorro de 570.000 euros (627.000 euros con el IVA).

La subvención local al transporte urbano, que el ayuntamiento incluye en su presupuesto en previsión por las pérdidas en el servicio, es de 3,3 millones para 2013, lo que obligaría para cumplirlo a cerrar este año, en el que el ayuntamiento está obligado a acabar con un déficit cero, con un descenso de un millón de euros en el déficit del autobús.

Los gastos del servicio de autobuses en el ejercicio del 2012 ascendieron a 6,9 millones, incluido el beneficio industrial que obtiene la empresa por su gestión. Los ingresos, que salen de la tarifa y de la publicidad en los autobuses, fueron de 2,8 millones de euros. El déficit de este servicio fue de casi 4,1 millones, que con la suma del IVA queda en 4,5.

Esta diferencia entre gastos e ingresos se financia por dos vías. Por un lado hay una subvención mensual, que en 2012 ascendió a 2,8 millones, y por otro la cantidad restante, 1,6 millones, se reconoce y queda pendiente.

El pasado año se volvió a recibir la subvención que el Estado concede a los ayuntamientos para destinarla al transporte público, ayuda que se había perdido en años anteriores. Según el Ministerio de Hacienda, el total de la subvención concedida a Cáceres en 2012 ascendió a 369.000 euros, por debajo de la cantidad que había presupuestado el consistorio, que esperaba 475.000. En el presupuesto de este año la previsión es de 470.000 euros.

El gobierno acordó el pasado año reclamar a la empresa Busursa, que fue la anterior concesionaria del servicio de autobuses, una indemnización por daños y perjuicios de 1.017.432 euros por la lesión patrimonial causada al consistorio por la denegación por parte del Estado de las subvenciones de 2009 y 2010 al no haber presentado la empresa las cuentas anuales aprobadas y auditadas.