A estas alturas de progreso y avance en las comunicaciones, Cáceres se ha convertido en una excepción al no tener aeropuerto, tampoco aeródromo, ni siquiera campo de vuelo. Proyectos no han faltado, incluso se ha llegado a anunciar un aeropuerto internacional junto a Aldea del Cano, pero al final todos los planes se han estrellado contra la falta de dinero o de voluntad política.
De hecho, el mayor hito aéreo de Cáceres se alcanzó hace ya largas décadas, durante la Segunda República, cuando Cáceres mantuvo una línea regular de pasajeros con Madrid. Aquel campo de aviación, situado en el actual ferial, tuvo un uso mucho mayor durante la Guerra Civil, ya que la plana mayor de la legión alemana Cóndor lo convirtió en base de algunos de sus potentes aparatos, además de una escuadrilla de cazas italianos Fiat-Chirri.
Cuando acabó la contienda, Cáceres dejó escapar el proyecto de escuela de cazas, que se ubicó en Talavera la Real. Con el tiempo desapareció el campo de aviación, pero en 1975 la Dirección General de Aviación Civil comenzó a realizar expropiaciones a 15 kilómetros al sur de Cáceres para habilitar otro campo de vuelo con miras a un futuro aeropuerto. Surgió así La Cervera, un enclave idóneo, sin montañas ni grandes riberos, con buen clima y mejor orientación. De hecho, la Diputación Provincial de Cáceres construyó una pista de 1.400 metros de longitud, pero detuvo el proyecto tras el grave accidente de Los Rodeos (Tenerife). Años más tarde planeó un aeropuerto de tercer nivel que tampoco prosperó.
Del todo a la nada
La Cervera quedó como campo de vuelo, y los reiterados intentos de convertirlo en aeródromo nunca tuvieron la fuerza suficiente, pese a que la inversión hubiera sido asequible, pero las instituciones no pusieron el empeño necesario. En 2004 trascendió que el nuevo plan de urbanismo contemplaba, otra vez, un aeropuerto de tercer nivel (vuelos interiores de pasajeros y mercancías). Meses más tarde, la Junta también desveló que se estudiaba la viabilidad de un aeropuerto. Pero nada prosperó, sino al contrario: La Cervera dejó de utilizarse por falta de seguridad.
El mayor proyecto estaba por llegar. Fue anunciado en mayo del 2006 por el expresidente Rodríguez Ibarra: la creación de un aeropuerto internacional, promovido por Caja Extremadura y respaldado por la Junta, sustentado en el boom de las líneas de bajo coste. Dos años más tarde se decidió su ubicación a 17 kilómetros al sur de Cáceres, entre Aldea del Cano y Casas de Don Antonio, cerca de la A-66, de la futura autovía Cáceres-Badajoz y del AVE. Con una inversión inicial de 150 millones de euros, preveía 2.500 empleos y unas extraordinarias perspectivas de 1,1 millones de viajeros hacia el año 2020.
Sin embargo, la compleja búsqueda de apoyos para financiar el proyecto comenzó a ralentizarlo, hasta congelarlo. Ahora los promotores del aeródromo se enfrentan al mismo reto, eso sí, 147 millones más barato.
