Tres de los pacientes afectados por legionela que se encontraban ingresados en el hospital San Pedro de Alcántara han recibido el alta médica entre el viernes y ayer. Por esta enfermedad estaban hospitalizadas cinco personas, las otras dos van «evolucionando en el sentido» que se preveía, según señala el consejero de Sanidad, José María Vergeles, y recoge la agencia Europa Press. Una de ellas se mantiene aún ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pero se encuentra «estable» y presenta una «leve mejoría», aclaró el consejero.
A primera hora de ayer José María Vergeles habló sobre la situación de los enfermos antes de participar en el XVIII Día Regional del Donante de Sangre en la comunidad, en la Asamblea de Extremadura, en Mérida. En ese momento solo había recibido el alta uno de los hospitalizados. «En principio quedan cuatro casos y a medida que se vayan produciendo que van estando asintomáticos y van evolucionando favorablemente se irán dando de alta», agregó Vergeles. Y así fue, a lo largo del día salieron del centro hospitalario otras dos personas más diagnosticadas.
Por otro lado, el consejero explicó que, a partir de la próxima semana, comenzará «un trabajo más intenso» en relación con todo lo que tiene ver con la hipercloración un poco más generalizada, para prevenir más casos».
Asimismo, reiteró que «los focos estaban dentro de los domicilios de los pacientes o dentro de los centros que frecuentaban», según los datos que se conocen hasta el momento del estudio epidemiológico; motivo por el cual «no hay ningún edificio ni ninguna torre de refrigeración que esté provocando en este momento ningún contagio de legionela en la ciudad de Cáceres».
Vergeles volvió a lanzar un mensaje de tranquilidad y de calma por este asunto, en tanto que «no hay peligro para la población», agregó. «No es un brote. No se ha provocado por un único foco. Los focos están en los domicilios y lo que estamos haciendo es que en cuanto se detecta el foco se producen las medidas de tratamiento de choque que son necesarias». Estas consisten, según explicó el consejero, en “una limpieza en profundidad de toda la tubería del domicilio así como una en una hipercloración».
José María Vergeles también señaló que, de forma preventiva, a partir de la próxima semana y en función de lo que los técnicos vayan determinando, se conocerán los niveles de cloro del resto de la capital cacereña.
«Trabajando de forma coordinada con el ayuntamiento y trabajando de forma coordinada con la empresa gestora del agua, Canal de Isabel II, decidiremos si hay que hiperclorar el agua, hasta la llegada a los domicilios para prevenir futuros problemas en relación a este tema», apuntó Vergeles. Este año ya se han registrado ocho casos de legionela en la región, seis en Cáceres.
