La propietaria de la Pajarería Tropical, Nadia Filipa, defendió ayer que los animales de su tienda están "perfectamente atendidos" y que "no han sido abandonados ni víctimas de malos tratos", como ha denunciado la Protectora de Animales de Cáceres. Sí reconoció que el establecimiento, situado en la calle París, está cerrado desde el lunes a las 18.30 al cacerer de licencia de apertura, un papeleo que tardará aún unos diez días en solucionarse.

"Los animales han recibido cuidados y alimentación todos los días mañana y tarde, y siempre ha habido un veterinario pendiente de su seguimiento médico las 24 horas del día", declaró Filipa a este diario.

Su versión contrasta con la de la Protectora de Animales, que ha denunciado el caso ante el Seprona dado que comprobó en la noche del martes --una vez cerrada la tienda por la policía local al carecer de permiso de apertura--, que los cachorros de perro no tenían "comida ni bebida" y se encontraban "sin cuidados" en una "completa situación de abandono". De la misma forma, el ayuntamiento ha puesto el caso en manos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta por si hubiera lugar a una sanción.

Nadia Filipa indicó que, contrariamente a lo dicho por la Protectora de Animales, la tienda no llevaba el martes cuatro días cerrada, sino solo uno. Sostiene que el martes a las 16 horas, ella acudió la tienda para alimentar a los animales y limpiar sus jaulas. Por tanto, añade, solo estuvieron solos hasta la mañana del miércoles, cuando comenzó a sacarlos del establecimiento para cuidarlos en su casa hasta que el ayuntamiento le dé la licencia de apertura.