La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) ha admitido a trámite la demanda presentada por la empresa cacereña Limpiezas Sánchez (Limsa), contra el concurso público convocado por el ayuntamiento para contratar la limpieza, conservación, mantenimiento y vigilancia de los centros escolares y otras dependencias municipales (en total, unas 50 instalaciones). El tribunal también concede diez días al consistorio cacereño para que exponga todo lo que estime oportuno.

La empresa, que se ha presentado al concurso como ute con Serproman y Seguridad Ceres, interpuso la demanda el pasado 24 de junio al considerar que el pliego de condiciones contiene varias indefiniciones. A su juicio, no desarrolla los criterios objetivos de adjudicación que servirán para valorar las ofertas de las distintas empresas, y para conocer las pautas que se seguirán a la hora de puntuar por medios personales y materiales, económicos y mejoras.

También denuncia que la oferta presentada por el grupo Lymicon-Conyser-Sercobi está por debajo de los convenios laborales, y que los precios de las tareas de mantenimiento no se incluyen. Por otro lado, advierte que el servicio de vigilancia no está definido en el pliego de condiciones.

Además, Limsa argumenta que las concentraciones de todos estos servicios (limpieza, vigilancia, conservación...), que hasta ahora se adjudicaban de forma individual, facilita que los grandes grupos empresariales puedan quedarse con el contrato. Según alega, la acumulación de tareas tan heterogéneas es de difícil prestación por una sola empresa, y favorece la suma de los servicios públicos municipales en pocas manos.

TRES OFERTAS

Han concurrido al concurso tres ofertas, de un lado la presentada por Limsa-Serproman y Seguridad Ceres, de otro la ute formada por Lymicon, Conyser y Sercobi, y por último el grupo Urbaser. Tiene un precio tipo de 1,3 millones de euros y un periodo de adjudicación de un año, prorrogable hasta tres.