El arquitecto Emilio Tuñón responsable del proyecto del Hotel Atrio en San Mateo, dio ayer las gracias porque "no se construyera el edificio inicial que pensamos y esté en marcha el actual", ya que tras la polémica suscitada en la ciudad a raíz del proyecto presentado en primera instancia, "volvimos a replantear todo de nuevo y ahora es mejor que era el primero", reconoció. Estas declaraciones las hizo en las jornadas Agora. El debate peninsular en Mérida, donde explicó que "el nuevo proyecto parte de un concepto elemental: el equilibrio de superficies y la salvaguardia del casco histórico".