UGT denuncia que los contratos que se están realizando para cubrir los puestos del nuevo hospital se han llevado a cabo «de forma irregular y arbitraria». Se refieren en concreto a la categoría de pinches de cocina donde, según indica el sindicato, se están haciendo «llamamientos a dedo, sin respetar el orden de prelación de la bolsa vigente en este momento». En concreto se trata de seis personas a las que se les ha prorrogado el contrato, cuando lo que debían hacer, insiste UGT, es llamar a las personas que estaban en la bolsa. Por esta razón exigen la dimisión del actual gerente de área, al que considera «conocedor y consentidor de las irregularidades e ilegalidades que se están cometiendo». El sindicato anuncia que se tomarán medidas para «la salvaguarda de los trabajadores».