Eulogio Neila y su mujer Luisa Lubián recibieron ayer el primer premio Valores Extremeños instaurado por la asociación de amigos de Gabriel y Galán. Son ganaderos de La Garganta y representan a los últimos trashumantes de Extremadura: cada año conducen el ganado entre la sierra de San Pedro y el Valle del Ambroz en busca de pastos.

El premio reconoce su esfuerzo por mantener una forma de vida tradicional que ha pasado de padres a hijos, concretamente en el caso de Eulogio Neila, han sido seis generaciones. Sin embargo, el propio Neila reconocía ayer que la trashumancia "está seriamente en peligro". "Nosotros seguimos luchando por mantenerlo porque estamos convencidos de que es un medio de vida sano aunque no te hagas millonario. Pero la pérdida de pastos y la falta de jóvenes que quieran dedicarse a ello, amenazan su continuidad". En La Garganta, antes eran 60 familias las que se dedicaban a esto, ahora no llegan a diez.