Los vecinos del Adarve del Cristo exigen una solución a la casa okupa situada en el número 11 de la calle. Ninguno de ellos quiso dar su nombre a este diario pero muchos protestaban por la inseguridad que se respira en su calle desde hace seis meses, cuando los indigentes ocuparon la casa.

De momento no ha sucedido ningún incidente reseñable, pero los vecinos aseguran que a diario soportan ruidos hasta altas horas de la mañana y que la calle se ha convertido en una zona común para la práctica del menudeo: "han llegado a llamar a mi puerta para que les diera la droga. Tenemos miedo de que algún día pase algo" decía una vecina mientras se quejaba de la inseguridad que sienten ya que la mayoría de los residentes de la calle son personas mayores (muchos de ellos viven solos) y algunos matrimonios con niños pequeños.

La casa, que está llena de basura, pertenece a ocho propietarios, pero el heredero primero y titular de la misma reside en Madrid, por lo que aún no se han sentado a hablar sobre lo que harán con la misma, según explicó a EL PERIODICO uno de los dueños de la misma que tampoco quiso revelar su identidad.

El grupo municipal PP-EU ya denunció esta situación hace unos días y presentó una moción en el pleno del pasado jueves para que se tomaran medidas en el asunto. La petición fue aprobada por los votos del PSOE y PP (IU y FC se abstuvieron). Además, el concejal de Infraestructuras aclaró a la corporación que el ayuntamiento ya trabaja para buscar una solución.

OTRAS DENUNCIAS Los vecinos volvieron a quejarse además del mal estado en el que se encuentra el acerado de su calle. Según cuentan, el ayuntamiento ha arreglado solo algunos de los socavones de la misma, pero lo cierto es que la muchas zonas de la vía se encuentran levantadas. "Esta calle lleva sin arreglarse más de cincuenta años. Yo nací aquí y vi cómo la levantaron para meter las tuberías para poner el agua corriente. Desde entonces no se ha vuelto a hacer nada. Las tuberías son muy antiguas y tienen problemas. Y la calle está hecha un desastre. Pero nunca hacen nada. Vinieron a arreglar solo una parte y luego nada", protestaba una de las vecinas que vive justo en mitad de la calle.