La Agrupación de Asociaciones de Vecinos de Cáceres muestra su preocupación por el "abandono" de las pistas deportivas de los distintos barrios de la ciudad, tras recabar datos de las distintas asociaciones sobre el estado de estas instalaciones en sus respectivos barrios.

Así, del informe se deduce "no sólo un progresivo abandono en el mantenimiento, sino también errores funcionales e instalaciones mal concebidas en su construcción", según informa la agrupación vecinal.

Entre todos los casos llama la atención el del barrio Cáceres el Viejo que además de no tener pistas deportivas cercanas, ha visto como el proyecto de complejo deportivo Ramos Guija se quedó sin concretar, con un campo de fútbol sin realizar y con unos vestuarios asaltados y destruidos por vándalos y unos "accesos que presentan insalubridad y peligro para la integridad".

"La situación en Aguas Vivas también es lamentable", alerta y recuerda que su asociación vecinal ha instado repetidas veces al ayuntamiento para que recupere las pistas destruidas por la granizada, en las que además de faltar vallados y puertas, también faltan porterías.

Estas pistas fueron solo parcialmente reparadas y no presentan ni siquiera líneas pintadas en el suelo para la práctica deportiva. Se da la circunstancia además, de que estas pistas son muy utilizadas no sólo por personas de la barriada, sino también por zonas próximas.

Las pistas de los Fratres, por defecto en su diseño, presentan unas vallas con altura insuficiente para la práctica deportiva, algo que la Agrupación vecinal achaca a "errores de diseño por falta de conocimientos deportivos por parte de los arquitectos" que se repiten en varias instalaciones de la ciudad.

Este es el caso de las pistas de La Cañada, que presentan "un recinto inacabado" al que además de faltarle el mobiliario urbano, está mal concebido para la práctica del deporte ya que sólo presenta la mitad del cerramiento y el estado de deterioro del mismo presenta graves problemas de seguridad.

Según recoge el informe, "dicho cerramiento se ha deteriorado por la mala calidad del mismo" al igual que ocurre en otras tantas pistas de reciente construcción como las del Residencia Univerisad en las que se diseñaron "farolas peligrosas muy próximas a las líneas de banda, incluso con tornillos salientes".

"En cuanto a las modernas instalaciones del nuevo Pabellón en Aldea Moret, no se pueden practicar algunos deportes como el balonmano, ya que las líneas reglamentarias no existen" y añade que "junto a este pabellón, las pistas descubiertas son difícilmente practicables a no contar con vallas de cerramiento en buena parte de su perímetro".

Pero "uno de los hechos que más hay que lamentar", según los vecinos, se da en la barriada de Antonio Canales (plaza de Italia), cuyas pistas deportivas, junto a la Iglesia de San José, "permanecen cerradas sin que se haya buscado una solución, reclamada insistentemente desde la asociación de vecinos, que se queja del perjuicio que esto ocasiona en su barriada para las personas que quieren practicar deporte".

En el barrio de los Castellanos, las dos pistas "tienen un nivel de utilización más que aceptable", pero, "como muchas pistas de la ciudad apenas tienen mantenimiento y limpieza y en su abandono presentan un lamentable deterioro general con puertas y cerramiento oxidado, desconchones, porterías sueltas y con las redes desgarradas, tableros carcomidos, soportes, rotos y peligrosos, vallado con peligro de desprendimiento y líneas desdibujadas".

Según el informe "estas dos pistas también presentan un error de concepción ya que no tienen separación perimetral ni vallado de separación para facilitar la práctica deportiva", además de no tener vestuarios y duchas próximos, como ocurre en otras muchas pistas deportivas en las que, debido a que en su concepción, no se situaron junto a edificios públicos con instalaciones higiénicas o no se construyeron.

En la barriada de Moctezuma, sus pistas presentan uno de los niveles de utilización más altos de la ciudad, pero también tienen un cerramiento con "bastante deterioro, desconchones y pintadas por actos vandálicos". Además, a menudo se producen roturas de cristales en edificios próximos, por falta de elementos de protección.

También existen quejas sobre las pistas del camino de Hinche, utilizadas con regularidad y que están en el entorno del Parque del Príncipe. "Al ser de tierra, cuando llueve son impracticables, sus accesos están deteriorados y al igual que en muchas otras pistas, la accesibilidad es muy deficiente".

Desde la Asociación de Vecinos Vía de la Plata se demanda la instalación de iluminación en las pistas de su entorno, que es un problema que también ocurre en otras pistas de la ciudad. En cuanto a las pistas existentes junto a su sede vecinal y al Centro Cívico, presentan pintadas, un cerramiento deteriorado, porterías defectuosas y con redes rotas, servicios deteriorados y peligro de rotura en vallas y puertas.

La asociación demanda que se retire la arboleda perimetral, que además de "no recibir apenas mantenimiento, es un problema para la práctica deportiva y como foco de infecciones". La accesibilidad de estas pistas se ve muy reducida debido al espesor de los setos y el arbolado que obstruyen el paso por la rampa.

Los vecinos del barrio de San Francisco también se quejan del "insuficiente" mantenimiento que reciben las pistas de su barriada, con deterioro notable en porterías y canastas. Un problema parecido ocurre con las instalaciones de Nuevo Cáceres, que cuenta con un complejo deportivo con dos pistas y un campo de fútbol 7, en los que ya desaparecieron redes en porterías y canastas y también presenta deterioro en su cerramiento.

En estas pistas de reciente construcción la asociación vecinal detectó porterías sueltas y peligro por desprendimiento de vallas y se queja de la poca accesibilidad para vehículos de emergencia y de que de que sólo se limpie un día a la semana, ya que se utiliza bastante. "La asociación vecinal tampoco entiende que instalaciones modernas sean concebidas sin servicios y vestuarios con duchas".