Hay división de opiniones, aunque los vecinos lo tienen claro: son favorables a los cortes de tráfico durante los fines de semana pero no a que los hosteleros puedan poner veladores en las calles. Responden al informe técnico encargado por el ayuntamiento sobre la posibilidad de restringir el tráfico los sábados y domingos en las calles Gallegos, Hornos, San Juan, Sergio Sánchez y Pizarro en horario nocturno, habilitando una salida para los taxis en Rosso de Luna. «Me parece bien que sea para abrir la calle a toda la gente, pero si es para poner veladores, de ninguna de las maneras», afirma rotunda Sonia Ponce, que vive en un piso situado en una de las calles que se verían afectadas si entrara en vigor la propuesta.

Respecto al problema de los veladores, Ponce puede estar tranquila. Según indicó Rafael Mateos, portavoz municipal, no estaría permitida la instalación de «terrazas o veladores», ni tampoco se pretende «en ningún caso» la peatonalización de las vías mencionadas. El informe aún está pendiente del juicio de la policía local. La junta de gobierno ya lo ha analizado, la sección de Viales y Tráfico es favorable a esta «peatonalización puntual» y, según confirmó el propio Mateos, todos los grupos municipales de la capital cacereña coinciden en que el viandante debe «ganar espacios» en las calles de la ciudad.

«Me parece una buena opción para toda la gente que sale por aquí. Restringir el tráfico los fines de semana puede ser bueno. Además, no creo que esta sea una de las calles con más tránsito de coches en la ciudad», afirma Carlos Durán, un vecino cacereño que paseaba por la calle Pizarro una mañana de la pasada semana. Afirma Durán que la medida podría no resultar beneficiosa en otras vías como Cánovas, que soporta diariamente una mayor cantidad de vehículos.

El informe tiene su origen en una moción presentada por Ciudadanos que originó que un pleno del consistorio cacereño celebrado en septiembre aprobara por unanimidad aumentar la peatonalización parcial y durante algunos periodos concretos (navidades, época festival, fines de semana o días festivos) la peatonalización de algunas calles de la ciudad. Por su parte, el grupo popular introdujo una enmienda para que el texto no se refiriera a calles o avenidas en concreto, sino a zonas específicas de la ciudad, tal y como expresó la propia alcaldesa, Elena Nevado. Los estudios de viabilidad, en opinión de los populares, deberían dirigirse en este sentido.

Las Hermanas María López y Lucía Espinosa, que suelen transitar a menudo ambas calles, también se muestran favorables a la medida recogida en el informe, siempre que se limite a días no laborables. «Si es sólo para los fines de semana nos parece muy bien. Va a ser muy bueno para los restaurantes», dijeron, al tiempo que admitieron que ellas suelen transitar mucho las calles que se recogen en el informe. De la misma opinión es Juan Sebastián, otro de los peatones. «Me parece bien. Es una buena alternativa. Aunque si es para poner veladores, estoy en completo desacuerdo», manifiesta.

TAXIS // El texto encargado por la Junta Local de Gobierno enfatiza que las calles a las que se refiere «funcionalmente pueden considerarse calles con una notable presencia de locales de hostelería» y también una zona donde se encuentran ubicados los siguientes hoteles: NH Palacio de Oquendo, Albarragena y Don Carlos, zona que actualmente es «de obligado recorrido para vehículos para acceso y salida de residentes y clientes» de los establecimientos mencionados. Para los taxis tendría «un impacto mínimo» si se adoptara estrictamente lo que recoge la actual ordenanza, que indica que «los vehículos taxi con licencia municipal del ayuntamiento que se encuentren de servicio y lleven encendido el indicador luminoso de tarifa, están autorizados para acceder a las zonas restringidas en cualquier horario, pero solamente para recoger o dejar viajeros en dicha zona».

Por último, el informe indica que este «cambio sustancial» residiría en que el control debería realizarlo la policía local, quizás «con una mayor presencia durante los primeros meses» desde que entrara en vigor la iniciativa. Afirma también que sólo podría controlar si los vehículos que entran están autorizados (clientes de hoteles y vecinos) o no desde un punto: la intersección de las calles Hornos y Soledad.