Los vecinos del Edificio Arés de la calle Emilio Cardenal Hernández, en la Mejostilla, llevan años de quejas al ayuntamiento por las altas velocidades que alcanzan los coches en esta vía. El 27 de enero de 2014, la comunidad de vecinos, que incluye los números 2, 4, 6, 8 y 10 de la calle, registraron un escrito en el consitorio donde pedían «reductores de velocidad en todo el tramo» de Emilio Cardenal Hernández, «pues es muy frecuente que los coches que pasan por la carretera existente en frente del edificio lo hagan a una velocidad alta», justificaban. En concreto, la comunidad de vecinos pedía «un par de reductores a lo largo de la carretera».

Esta calle, de doble vía, comunica la Ronda Norte, una de las principales arterias de la ciudad, con sectores tradicionales de Mejostilla, residenciales como Gredos, Ronda, la urbanización Cáceres el Viejo, el polígono ganadero y el nuevo parque empresarial.

Entre los cinco portales del Edificio Arés suman 108 viviendas. En muchas de ellas se han instalado familias jóvenes, como la de Carlos Cantero, del número 2 de Emilio Cardenal Hernández, que diaramente tienen que cruzar esta calle para llevar a sus hijos al colegio Nazaret, «hay dos pasos de peatones y ninguno tiene reductores de velocidad o algo que se le parezca, algo que a los conductores les haga frenar», asegura.

Como la comunidad de vecinos no recibió respuesta del ayuntamiento, el 2 de marzo de 2017 volvieron a registrar otro escrito, donde solicitaban de nuevo pasos elevados «o poner en la calzada unos reductores de velocidad que obliguen a los conductores de vehículos a tener que pasar mucho más despacio», expone el texto. Como pone de manifiesto el escrito vecinal, por esta calle «pasan la mayoría de los coches» de la zona.

El ayuntamiento, de momento, no ha respondido tampoco a este escrito, registrado hace casi un año, «en la avenida de la Hispanidad han tenido que atropellar a dos personas para que lo pongan, ¿aquí tenemos que esperar a lo mismo?», se pregunta Carlos Cantero.

Este vecino señala que en la calle Emilio Cardenal Hernández no es extraño ver el coche camuflado de la policía local con un radar, lo que considera una evidencia de las altas velocidades por la que circulan los vehículos por esta vía.

Este periódico ha consultado al ayuntamiento sobre el requerimiento vecinal, aunque aún no ha facilitado ninguna postura oficial, que se prevé para los próximos días.