Los vecinos demandan una zona canina en el parque de la calle Miguel Ángel Ortí Belmonte, próximo al Centro de Salud de Mejostilla, que reúna las condiciones necesarias de mobiliario y servicios para poder llevar allí a sus mascotas, y tener la posibilidad de dejarlas sueltas. Así lo afirma el Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Cáceres, que se hace eco de esta petición tras la reunión mantenida por su portavoz, Luis Salaya, con los residentes de la zona.

«Me han manifestado la problemática que tienen con los perros, ya que no para de ir la policía a multar y no disponen de alternativas cercanas para estar con sus animales», afirma Salaya. El área canina que ya existe en Mejostilla, próxima al parque comercial donde se ubican Electrocash o Burguer King, se sitúa lejos de esta zona y además se encuentra «descuidada» y «en muy mal estado», indica Salaya. «Carece de las condiciones mínimas que debe tener un parque para llevar sueltos a los perros, no se mantiene limpio, no tiene bancos ni agua para los animales, ni tampoco sombra».

En cambio, continúa el portavoz socialista, el parque de la calle Miguel Ángel Ortí Belmonte se encuentra dividido en tres parcelas y en dos zonas muy amplias, «una de ellas es zona de familias y la otra solo de gente con perros y, por tanto, con habilitar una sería suficiente, ya que se trata de un parque poco concurrido y prácticamente solo van los vecinos que tienen animales», matiza Luis Salaya.

«LO MANTIENEN LIMPIO» / Los vecinos están «muy preocupados» por este tema, «porque además están poniendo muchísimas multas por llevar a los perros sueltos en un parque al que solo van realmente personas con animales, que por otra parte lo mantienen limpio», declara el representante socialista.

Por ello, los vecinos solicitan que se normalice esta situación, «y si hay un problema con los perros, la manera de solucionarlo no es como se está haciendo ahora, enviando a la policía constantemente a multar a los propietarios de los animales, que es algo que no está funcionando, sino hablar con los vecinos para hacer lo que demandan, que es un parque para perros», insiste.

Un parque, matiza Salaya, que reúna todas las condiciones mínimas, «y que no ocurra como en otras zonas, donde lo único que se ha hecho es poner una valla alta y después se ha abandonado la parcela, sino que se mantenga como está, con sombra, bancos y papeleras; que no se instale una valla carcelaria sino una baja o de madera».

«Los vecinos mantienen el parque limpio, son cívicos y recogen los excrementos», concluye el portavoz, «por ello pedimos que se haga con urgencia este parque y que además se pongan en condiciones el resto de los parques caninos de la ciudad».