El concejal no adscrito, el independiente Felipe Vela, afirmó ayer que el alcalde, José María Saponi, cuenta con su voto para aprobar la modificación puntual del plan de urbanismo en el colegio de las Carmelitas, un requisito necesario para la instalación de El Corte Inglés en esta parcela. Este anuncio facilita al gobierno local la aprobación de la operación, ya que el concejal del gobierno Manuel Rodríguez Cancho, que se opone a la misma en sus términos actuales, ha asegurado que no será un obstáculo y que entregará su acta para que el siguiente de la lista del PP entre en la corporación y vote.

A pesar de esta disposición de Vela a votar a favor, el concejal dudó de que dé tiempo de aprobar el convenio que regula esta operación, debido a que el 31 de diciembre pierde su vigencia y libera a las partes de su cumplimiento. Vela, que precisó que hasta la semana pasada no se le remitió todo el expediente, puntualizó que los informes son contrarios a que esta operación sea la adecuada, pero que la votaría a favor "dado el interés general" que conlleva un Corte Inglés.

El gobierno local necesita 13 votos para poder aprobar la modificación. Ahora tendría 11, dado que su edil Manuel Rodríguez Cancho ha sido claro al asegurar que no votará esta operación en sus términos actuales, y con Vela llegaría a 12 votos. El grupo socialista ha expresado sus dudas sobre el sentido de su voto por como se está planteando la operación, mientras que IU no la apoyará al considerar que hasta ahora priman los intereses especulativos frente a los económicos y la generación de empleo.

Vela preguntará mañana al alcalde ante el pleno de la corporación si el ayuntamiento "está en condiciones de sacar adelante el convenio de El Corte Inglés" debido a sus cláusulas resolutivas. El concejal consideró que el alcalde al decir que llevará al pleno la operación "echa un órdago al resto de grupos consciente de que no puede sacar adelante este convenio". Saponi indicó hace una semana que cada grupo tendrá que explicar en el pleno por qué no quiere El Corte Inglés si no vota a favor del convenio.

Más que la confirmación de que dará su voto a favor, las palabras de Felipe Vela tienen más incidencia al destacar que el convenio no se va a poder cumplir y que habría que renegociar las condiciones de la recalificación de la parcela del colegio. En ese caso, su propuesta es que se haga una recalificación del solar sólo para usos docentes y comerciales, excluyendo los residenciales planteados en el convenio.

Para aprobar la operación en sus términos actuales, el pleno tendría que ratificar como muy tarde el convenio y la modificación a finales de octubre. El convenio especifica que a 31 de diciembre debe de estar aprobada provisionalmente la variación del plan para prorrogarlo. Esa modificación es necesaria para que en la parcela se admitan otros usos además del docente.

La modificación de un plan de urbanismo lleva tres aprobaciones: inicial, tras la que se abre una exposición pública de un mes con presentación de alegaciones; provisional, tras la resolución de las alegaciones que haya previo informe técnico; y la definitiva, que corresponde a la administración autonómica.

Para aprobar la modificación se necesita mayoría absoluta (13 de los 25 votos de la corporación). Antes de trasladar al pleno esta modificación para su aprobación inicial se necesita el dictamen de la comisión de Urbanismo. Cancho dejaría el acta en ese momento, cuando pasase por la comisión si el convenio no se modifica. Cancho considera que en sus términos actuales se generan unos beneficios con una recalificación de terrenos que beneficia a los que ya han firmado el convenio (congregación de religiosas, la sociedad Estudio Urbanísticos y Medio Ambientales y El Corte Inglés) sin que la ciudad reciba las compensaciones económicas adecuadas, cuestionando la operación en sí y no que haya un Corte Inglés.

PERU Y FRATRES La renuncia de Cancho se debe oficializar ante el pleno y la entrada de su sustituto se produciría en una nueva sesión. No hay fecha para trasladar el expediente a la comisión y mañana es el pleno ordinario de septiembre, en el que no se incluye la renuncia del concejal. Si finalmente se produce la renuncia de Cancho, se tendrían que convocar dos nuevos plenos, uno al menos extraordinario, en el plazo de un mes y que el expediente pase antes por Urbanismo, algo que debe producirse antes de mediados de octubre.

En la comisión de Urbanismo celebrada ayer sí se abordó una modificación puntual del plan general de urbanismo que afecta a las parcelas para equipamientos deportivos con una superficie superior a los cinco mil metros cuadrados. El dictamen fue favorable lo que facilitará que haya usos comerciales tanto en el centro deportivo del Perú, que está en construcción y donde ya se proyectan, y en la parcela de Los Fratres, donde el consistorio pretende que se construya un párking, un pabellón polideportivo y que también haya dotaciones comerciales, para lo que se convocará un concurso de proyecto, obra y explotación.