Cáceres volverá a recuperar su sustancia proyectándola a Europa. Esta será la principal meta de un trabajo que la Fundación Cáceres Siglo XXI, presidida por el concejal Felipe Vela, futuro presidente ejecutivo del 2016, ofrecerá al Consorcio para desarrollarla hasta alcanzar el mayor reto al que se enfrenta la ciudad durante esta legislatura: ganar la capitalidad. La fundación, creada hace un año, ha desarrollado un amplio proyecto que pasa por un triple objetivo: dinamizar y revitalizar el casco antiguo, potenciar el centro histórico y hacer que los ciudadanos participen de la cultura. El proyecto lo asumirá el Consorcio, tal como establece el pacto de legislatura firmado entre el PSOE y Foro Ciudadano, formación política que obtuvo un escaño en las pasadas elecciones y que lidera Felipe Vela.

Ideas, gestión y gente comprometida son las piezas que ofrece la fundación para que el mecanismo funcione. También inversiones, "porque si en Cáceres metemos 300 millones de euros será mejor que si metemos 50", ejemplifica un ilusionado Felipe Vela, que confiesa que está dando "vueltas y vueltas" a la idea de la capitalidad y que cada día que pasa se la cree más. "Dentro de cuatro años veo una ciudad distinta, y este proyecto es una bomba, una cosa impresionante", subraya el presidente.

Para ello, Vela plantea una actuación global y simultánea con todos los sectores implicados. Esa actuación será fruto del Proyecto Intramuros Siglo XXI , que se redactó como "el proyecto estrella de la fundación". En él se realiza un "análisis del casco antiguo y el centro histórico". Intramuros Siglo XXI tiene un campo de actuación que comienza en el paseo de Cánovas, a la altura de Las Chicuelas, y concluye en San Blas y la plaza de Italia, pasando lógicamente por el casco antiguo, la judería y sus aledaños.

ESTUDIO SOCIOECONOMICO Intramuros Siglo XXI actúa sobre conventos, palacios, tiendas, hostelería, residentes... Por eso, una de las acciones imprescindibles del proyecto --en cuya elaboración han participado urbanistas, historiadores, sociólogos, economistas...-- es la modificación del Plan Especial de Urbanismo que afecta al casco antiguo. Seguidamente, se debe abordar un estudio socieconómico que haga viables las principales iniciativas. Una de las primeras acciones incluye la realización de un catálogo de todos los edificios (casas-palacio) de la ciudad monumental y la zona centro para estudiar a qué se pueden dedicar, cuáles están cerradas y en condiciones de ser abiertas y cuáles pueden ser reutilizadas.

Vela calcula en una media docena el número de palacios que se podrían abrir y plantea la posibilidad de buscar un sistema de beneficios fiscales y subvenciones "para que eso sea también interesante para el propietario del palacio". Pero además el proyecto pretende impulsar la hostelería y la apertura de tiendas. En este sentido, Vela insiste en que se deben abordar medidas globales "porque abrir el palacio no resuelve el problema, abrir tres bares no resuelve el problema", pero abordar varias iniciativas en su conjunto "sí resuelve el problema".

Intramuros Siglo XXI podría potenciar la apertura de terrazas florentinas, microclimas semejantes a los que se utilizaron en la Exposición Universal de Sevilla en 1992 para combatir el calor durante los meses del verano, o facilitar la conversión de algunos palacios en cafés semejantes a los que existen en Viena, por ejemplo, con el respeto a sus estructuras, sus majestuosas bóvedas y sus grandes espejos.

Todo se ejecutaría "respetando" el patrimonio. Y eso eliminaría el que la parte antigua sirviera de nido a "marcas tipo MacDonal´s", por ejemplo, "que no tendrían cabida". Se trata de una oferta destinada a "una clientela habituada al respeto al patrimonio: nada de tomar copas en la calle, eso está terminantemente prohibido", subraya Vela.

Igualmente, y con el empujón del futuro hotel de cinco estrellas de Atrio en San Mateo, se impulsaría la apertura de nuevos establecimientos hoteleros, casas rurales dentro del recinto intramuros... Pero el proyecto también pasa por la revitalización de la plaza Mayor y de la calle General Ezponda, potenciando establecimientos hoteleros y de restauración más asequibles para el turista. El presidente de la fundación recuerda, asimismo, la necesidad de ofrecer alternativas a los turistas que ahora pasan por Cáceres y no se quedan ni a dormir ni a comer.

Y finalmente, Felipe Vela aclara que su objetivo no es hacer párkings sino poner esos aparcamientos al servicio del proyecto intramuros. "Hay que distinguir entre el objetivo y los elementos que comportan la consecución del objetivo". Los aparcamientos estarán en Cánovas (a la altura de Hacienda), en plaza Marrón y en el área de Mira al Río.