El consejero de Sanidad José María Vergeles vuelve a tender la mano a los Médicos Interno Residentes (MIR) para intentar desbloquear la situación y conseguir que se desconvoque la huelga. Lo hizo durante su intervención en la Asamblea de Extremadura, donde compareció a petición de los grupos políticos de la oposición. «Ofrezco el diálogo y trabajo para dar soluciones para que su programa de formación mejore, y lo seguiré ofreciendo», afirmó el titular de Sanidad. Por el momento, a pesar de este nuevo acercamiento, ambas partes no están emplazadas a ningún nuevo encuentro por lo que la huelga indefinida continúa.
Insistió en que, a pesar del paro, «la actividad sanitaria está asegurada». Los residentes, en cambio, afirman que la celebración el inicio de las movilizaciones ha venido precisamente a confirmar que sin ellos «no se sostienen» las Urgencias. Tal y como ellos informaron ayer el Servicio Extremeño de Salud se ha visto obligado a incrementar la plantilla en un 50% para poder garantizar la atención. Así, el miércoles en el turno de tarde trabajaron dos adjuntos más de lo habitual (estaban siete) y en el turno de noche hizo falta un adjunto más (normalmente este servicio lo atienden dos facultativos y el miércoles lo hicieron tres).
«Es evidente que el servicio no se ha sostenido sin refuerzos. Esto deja en evidencia lo defendido por la gerencia de área y demuestra que sin los residentes se requiere un aumento considerable de efectivos titulares», aseguran. Y recuerdan que en esto precisamente se basan sus reclamaciones: «Un aumento de titulares para mejorar la formación y la atención sanitaria a los pacientes y mejorar el desempeño de la labor del facultativo de Urgencias». Recuerdan, además, que fue necesario el refuerzo a pesar de que los médicos solo se dedicaron a labor asistencial y no de supervisión, ya que solo había un residente, el resto secundó la huelga.
Por su parte Vergeles señaló en su comparecencia que Extremadura aprobó dos reales decretos, uno en 2006 y otro en 2008, en los que se regula las relaciones laborales y las formativas de estos residentes. «Según esto, la adquisición de competencias es gradual e importante, por eso es importante que no se hable de mano de obra barata porque nunca lo hemos hecho» advirtió. Y recordó el plan funcional aprobado para intentar mejorar la supervisión, que supondrá incorporar a partir del 1 de diciembre un adjunto más en horario de tarde que supervise a los residentes de primer año que se encargan de las Urgencias pediátricas (esta tarea se le encargará a uno de los médicos de guardia en el turno de noche). Y a partir del 1 de enero un médico más los fines de semana que hará turnos de 10-12 horas. Con el compromiso de aumentar plantillas si los presupuestos lo permiten.
DESDE ESTE DOMINGO / Este plan funcional, que fue aprobado por los médicos de Urgencias, se pondrá en marcha a partir de este domingo, a pesar de que no ha sido aceptado por los residentes. Y avanzó que ya está listo el protocolo de supervisión que solicitaban los MIR y que es obligatorio desde 2008. Ahora debe ser aprobado por la comisión de docencia.
El consejero sí reconoció, no obstante, que del programa formativo de los MIR lo único que no se puede cumplir en estos momentos es «la actividad formativa de las guardias de las Urgencias», que supone una «pequeña parte» -añadió- de este programa.
Por otro lado ayer el colegio de médicos instó a ambas partes a retomar las negociaciones para llegar a un acuerdo que permita solucionar el actual problema y ponga fin a la huelga. El presidente del colectivo, Carlos Arjona, pide además a la Consejería de Sanidad a que adopte las «medidas necesarias» para mejorar la formación MIR con el objetivo de que las plazas ofertadas en la siguiente convocatoria en Extremadura sean «atractivas y permitan solucionar la actual falta de médicos en la región».
La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), por su parte, mostró ayer su preocupación por la celebración de la huelga y exige también al SES y a los MIR «resolver este conflicto de forma que se garantice el bienestar de los pacientes». «El principal objetivo del SES es garantizar las prestaciones adecuadas y su actitud de tratar de conciliar conflictos de estas características», insistió el colectivo.
