El azar o quizás un poco de suerte quiso que el domingo por la mañana, una pareja que paseaba por una escombrera en las inmediaciones de Torrecilla de la Tiesa se detuviera al escuchar los lamentos de un animal. Al localizar el lugar del que procedían vieron que se trataba de un perro que se encontraba atrapado debajo de un saco que tenía piedras y arena. Llamaron a la policía local de Trujillo, localidad próxima a Torrecilla de la Tiesa, y estos a su vez a la organización Proyecto Animalista, que además se der uno de los colectivos que gestiona la perrera de Cáceres también desarrolla una labor independiente de asistencia a los animales.

Fueron ellos quienes se pusieron en contacto con el servicio de urgencias del hospital de la facultad de Veterinaria para llevar allí al animal, que ahora se recupera de un fuerte traumatismo craneoencefálico y varios golpes. "Parece que ha sido apedreado y que después le lanzaron el saco de arena y piedras", señalan desde el hospital, donde califican de "acto de crueldad" lo sucedido con este animal, una hembra de unos siete meses.

EN SHOCK Cuando el equipo veterinario recibió al cachorro se encontraba en estado de 'shock' e incluso temieron que no pudiera salir adelante. Sin embargo ayer la recuperación iba a buen ritmo, aunque el animal deberá estar al menos una semana más hospitalizado hasta que remita por completo la inflamación de los golpes en la cabeza, los más severos.

Una vez que el animal se recupere se hará cargo de él el colectivo Proyecto Animalista, uno de los que gestiona la perrera de Cáceres, aunque no se trasladará a estas instalaciones sino a otra parcela que tienen en el polígono ganadero, donde se le buscará un nuevo hogar.