L a Marcha por la Paz promovida por la Comunidad Parroquial de Nuestra Señora de Guadalupe para promover la convivencia entre religiones y culturas vivió ayer su sexta edición con la asistencia de unas 350 personas según la policía local. La impresión de algunos asistentes es que hubo menos gente que años anteriores por coincidir con el primer fin de semana de las vacaciones de Navidad.

A las 18.00 se pusieron en marcha desde el inicio del Paseo de Cánovas, junto a la estatua de Gabriel y Galán. En un ambiente festivo, joven y familiar, fueron caminando por la calzada con el tráfico cortado hasta el final de la avenida de España. Rodearon el parque de Calvo Sotelo y subieron por el lado contrario de la avenida hasta el quiosco de la música. Un recorrido de unos 45 minutos en los que se fueron lanzando desde la megafonía lemas como Caminemos todos juntos por la paz o el conocido No hay camino para la paz, la paz es el camino . Hubo numerosas pancartas. En la de la cabecera se podía leer Todas las religiones por la paz .

Cuando se llegó al quiosco de la música, dos jóvenes leyeron un manifiesto en castellano y en árabe alusivo a la posibilidad de convivir sin conflictos. No se pudo leer en hebreo porque la persona prevista para hacerlo no pudo asistir. El obispo de la diócesis, Francisco Cerro, se dirigió a los asistentes para recordar que la paz es el lenguaje que entienden todos los hombres.

OTRAS RELIGIONES Florentino Escribano, promotor de la iniciativa, afirma que cuando se habla de la paz "no se trata de hacer referencia a ningún conflicto concreto. Hablamos de paz en el sentido religioso porque hoy en día ciertos sectores quieren dividir oriente y occidente, lo cristiano y el islam. En sociedades plurales como la nuestra nos toca aprender a convivir con las diferencias étnicas, religiosas y culturales".

La marcha reunió a católicos, judíos, miembros de iglesias evangélicas y de la comunidad islámica de Cáceres, que participó en la iniciativa por primera vez porque se ha constituido hace menos de un año.