La construcción del nuevo hospital de Cáceres, que como adelantó ayer este diario se ha diseñado en zigzag y con cuatro edificios de tres plantas interconectados, que se ejecutarán e irán abriendo por fases, llevará al cierre del San Pedro de Alcántara y del Nuestra Señora de la Montaña. Se desconoce aún qué utilidad tendrán cuando se suspenda la hospitalaria.

Así lo han indicado a EL PERIODICO fuentes sanitarias, que advirtieron, no obstante, que el cierre total del San Pedro no será antes del 2010, teniendo en cuenta que la conclusión de las obras del nuevo hospital está prevista para finales del año 2009.

Lo que sí confirmaron es que se irán haciendo traslados sucesivos de servicios y unidades del actual hospital de la ronda de San Francisco hasta el nuevo complejo hospitalario que, según el diseño y anteproyecto del grupo de estudios de arquitectos Euroestudios-Argola-Andrés Perea, se comenzará a construir a finales de este mismo año en una parcela de la finca El Cuartillo, próxima a la N-521, carretera Cáceres-Trujillo.

Pendiente de que el proyecto definitivo del nuevo hospital establezca plazos para los traslados y orden del mismo para los respectivos servicios, lo que sí parece claro es que el nuevo hospital se abrirá por fases y en cada una de ellas se irán trasladando módulos asistenciales con sus correspondientes servicios y unidades quirúrgicas.

Y, según la previsión que en su día, allá por finales del año 2002, dieron los responsables sanitarios, cuando el nuevo hospital esté totalmente operativo, al cierre del hospital San Pedro de Alcántara también se unirá el de Nuestra Señora de la Montaña.

Lo que en su día, concretamente el 19 de noviembre del 2002, anunciaba el consejero de Sanidad, Guillermo Fernández Vara, era que cuando el nuevo hospital abra sus puertas Nuestra Señora de la Montaña dejaría de ser centro sanitario y sus servicios los asumiría el nuevo complejo hospitalario de El Cuartillo. Y también se refirió entonces al San Pedro de Alcántara, indicando que cuando sus servicios estén en el nuevo acogería el materno-infantil, disponiendo éste de una habitación por enfermo. Esto es algo que posteriormente el plan funcional desecharía, ya que según éste la apertura del nuevo hospital "se plantea en tres fases, que corresponden al módulo quirúrgico, el materno infantil y el médico, con sus correspondientes servicios y unidades de apoyo"

Y respecto al Virgen de la Montaña, Antonio Caperote, el entonces presidente de la diputación, propietaria del edificio, lo único que aseguró por las mismas fechas es que si este edificio dejaba de ser un centro hospitalario, se le daría un uso público, pero no se vendería.

Sea como sea, lo que sí está claro es que los servicios del San Pedro y el Virgen de la Montaña se distribuirán en el nuevo complejo hospitalario, cada cual en el edificio que le corresponda de los cuatro de que constará.

Son las de hospitalización, que se desarrolla en las tres plantas superiores. El basamento, que se desarrolla en dos plantas, la baja, con el vestíbulo, despachos, dormitorios de médicos de guardia, consultas, gabinetes, diagnósticos..., y la planta sótano, con la cocina, vestuarios... El bloque técnico, con la UCI, bloque quirúrgico, reanimación, obstetricia... en la planta baja, y urgencia, rehabilitación, almacenes, farmacia... en la semisótano. Y el edificio de las instalaciones.