Cáceres rendirá homenaje a las víctimas del terrorismo con un reconocimiento público y la dedicatoria de una calle, una plaza o una avenida. La decisión fue alcanzada ayer por unanimidad en el pleno municipal ordinario tras la proposición presentada por el Partido Popular. La alcaldesa, Carmen Heras, anunció que este acuerdo se trasladará a la Comisión de Cultura para que determine el lugar en el que se colocará una placa en recuerdo a las personas asesinadas en actos terroristas.

Este punto fue el más destacado en la sesión plenaria, que apenas duró una hora y en la que se aprobaron asuntos de trámite. Previsiblemente habrá otro pleno escoba el próximo día 31 para que la corporación pueda irse sus vacaciones con otros asuntos aún pendientes ya resueltos. La propuesta del PP para homenajear a las víctimas del terrorismo, a las que define como "referentes éticos", fue defendida por la concejala Elena Nevado, que expuso que "la acción de la justicia, la persecución policial, el impulso de la ley y del Estado de Derecho, así como la unidad de los demócratas, no son suficientes para derrotar al terrorismo si no van acompañados del reconocimiento a las víctimas por defender la libertad, por no silenciarse ante las amenazas sufridas, por defender a España y su marco de convivencia".

CONTENIDO La proposición contempla dedicar el nombre de Víctimas del terrorismo "como reconocimiento institucional del valor humano en su máxima expresión y por la dignidad con que han sufrido un mal inconmensurable en nombre de todos". El PP accedió a retirar una alusión en el texto referida "a la falta de atención que han padecido las víctimas" ya que, según afirmó el portavoz del gobierno municipal, Lorenzo de la Calle, ningún gobierno democrático las ha abandonado.

La unanimidad se puso de manifiesto en la falta de debate para aprobar la propuesta, que incluye que "la sociedad española debe memoria, dignidad y justicia a las víctimas del terrorismo de ETA, GRAPO, Terra Lluire, 11M y la Yihad radical islámica".

También añade que "es el gobierno más cercano a ellos, el de los ayuntamientos y diputaciones, quien tiene que demostrar de forma indeleble el calor que necesitan las víctimas, sus familias y personas más queridas". Precisa que la colocación de la placa se haga con la participación de la sociedad civil y que sea "un homenaje de reconocimiento al sufrimiento e importante papel en defensa de las libertades de las víctimas".