Los voluntarios de DYA han repartido durante los días de feria 6.400 pulseras identificativas entre los más pequeños. La organización puso en marcha esta iniciativa en la Semana Santa de 2016 y en 2017 la implantó por primera vez en la Feria de San Fernando como un proyecto piloto. «Ha tenido una gran acogida, estamos muy satisfecho con el resultado», indicaron ayer desde la organización. Esta es la segunda edición en la que repartían de forma gratuita estos brazaletes y solo en la jornada del sábado (la última con datos disponibles) entregaron 700. Las pulseras llevan el nombre del niño y el teléfono de contacto del adulto que está a su cargo, y cuentan con un cierre de seguridad para evitar que puedan perderlas.