El pleno de la corporación local no aprobó ayer la moción presentada por el grupo municipal de Ciudadanos en la que se pedía «una condena de los actos de odio y violencia» sufridos por los representantes de Cs en su participación en los actos del Orgullo LGTBI» en Madrid. Cs contó con el apoyo del PP, pero tuvo el voto en contra del PSOE, Unidas Podemos y Vox, cuyo concejal, Teófilo Amores, explicó el rechazo porque Cs pide un respeto que no tiene con Vox «al haber anatemizado cualquier trato con nosotros hasta el punto de rechazar sentarse» con Vox, «actitud que viola el contenido de los artículos 10 y 14 de la Constitución de un modo más flagrante y lesivo que el que sufrieron sus dirigentes» en el desfile de Madrid. Este desencuentro entre ambos partidos vino precedido de otro en el debate sobre la moción de la segunda fase del hospital.

En el punto de ruegos y preguntas, el concejal del grupo municipal del PP, Domingo Expósito, preguntó a Salaya sobre el despido del director de la Oficina de Desarrollo Urbano y Ciudad Histórica y las razones para tomar esta decisión. Expósito recordó que Francisco Leza accedió a su puesto tras «una convocatoria pública y en concurrencia competitiva» y que la comunicación del despido se produjo a los pocos días de la entrada del nuevo gobierno, «y no ha habido tiempo suficiente para evaluar el trabajo» del director técnico. El concejal del PP preguntó si se revisó el cumplimiento de objetivos, «que es un principio fundamental establecido en el Estatuto Básico del Empleado Público», si se tomó la decisión en base a un informe y qué planes tiene el gobierno local sobre sacar de nuevo la plaza o reestructurar el área de Urbanismo. Salaya contestó que la decisión se tomó porque no se cumplen los objetivos previstos en el nombramiento y anunció que si este puesto se vuelve a sacar se hará «mediante una nueva convocatoria pública abierta».