El retraso del juicio a 16 presuntos narcotraficantes motivó que éstos quedaran en libertad provisional hasta conocerse la nueva fecha de la vista. Ahora, una nueva operación policial ha permitido detener a dos de ellos por el mismo delito por el que están ´en lista de espera´ para ser juzgados. Algo falla en el sistema judicial cuando se ve incapaz de acelerar un largo proceso y proteger a una población, como la de Aldea Moret, condenada a vivir entre botines de robos y ´narcopisos´. Hoy por hoy, en los juzgados cacereños aún resuena el silencio de la presunta víctima de una violación ocurrida hace cuatro años o las agresiones sexuales de un individuo que salía de la cárcel para delinquir. Las víctimas se merecen algo más que esto.

*Periodista