Los bujacos realizados por la Asociación de Discapacitados de Casar de Cáceres (Adiscasar) fueron los ganadores de la tercera edición del concurso de bujacos que convoca el ayuntamiento de esta localidad. Por ello, estos muñecos hechos con paja y ropas viejas, tuvieron el privilegio de ser casados el pasado domingo en la plaza como una de las actividades centrales del carnaval en Casar de Cáceres.

Durante el enlace, que en principio iba a ser por lo civil, se presentó el clero, concretamente un obispo y una monja, que obligaron a los bujacos a contraer matrimonio con todas las bendiciones eclesiásticas, a pesar de que uno de ellos reconocía haber ido obligado. Tras la pantomima, se repartió patatera, panceta y vino a los asistentes, que después disfrutaron de una fiesta de disfraces inspirada en los años 80.