Eso que parece ruido es la banda sonara de la felicidad de un pueblo con su carnaval». De ese modo se acercó el actor Fernando Tejero a los pacenses al pronunciar su pregón, ataviado de san Pedro, portero y portador de las llaves «para abrir el Carnaval de Badajoz», desde el balcón del ayuntamiento, acompañado por el alcalde, Francisco Javier Fragoso, y buena parte de la corporación municipal.

Fernando Tejero se esforzó por mostrar guiños a un público que llenaba la plaza de España --de 6.000 a 7.000 personas, según la policía local--. «Tengo las llaves del cielo, que no sabemos si existe, pero sí existe la gloria, el Carnaval de Badajoz», manifestó, para nombrar después los «mandamientos del Carnaval» y nombra lugares emblemáticos de la ciudad donde se celebran las fiesta.

«El Carnaval de Tenerife se mira, el de Cádiz se escucha, pero el de Badajoz se mira, se escucha y siente», dijo el pregonero. Ensalzó el uso del disfraz, «la vestimenta del cuerpo para desnudar el alma»; animó a que «si llueve, salid a la calle y haced el milagro de convertir el agua en vino». Y glosó que «la música es al alma lo que una tostada de cachuela el martes por la mañana al cuerpo, combustible».

También recordó a Pedro Montero, recientemente fallecido, y a su esposa, Pilar, y animó a los pacenses a que, aún siendo «el Carnaval de Interés Turístico Nacional y seguro que será internacional, aunque debe ser interestelar, el Carnaval es vuestro; vividlo como os guste aunque lo compartáis con el mundo».

También bromeó con su apellido al recordar que el Carnaval renace en 1981, «cuando casi os lo jode el golpe de Tejero, que no tiene relación conmigo; yo soy de otro árbol genealógico», dijo. Y terminó cantando con José Manuel Díez, de Diván del Duende, su canción Calles de Badajoz.

Previamente, Fernando Tejero fue recibido por el alcalde, que iba disfrazado de sheriff de «del oeste, de la diligencia del AVE». Sus compañeros de grupos iban del Lejano Oeste con un cartel que rezaba «Tren Extremadura. Se Busca vivo o muerto». Y entre ellos, Celestino Rodolfo, de cantinera algo descocada.

Los socialistas por su parte se vistieron de personajes históricos, entre ellos, Ricardo Cabezas, de Carlos V, algo escuálido; y la concejala de Cs, Julia Timón, de Mary Poppins.

El acto comenzó con la presentación del pregón a cargo de Emilio González Barroso, quien anunció la presencia del actor que hizo famosa «la frase de un poquito de por favor». Y al término del mismo, el alcalde entregó al pregonero una reproducción de la Puerta de Palmas..