Con la vista puesta en el cielo y el deseo de que la lluvia no desluzca la fiesta, la Asociación de Vecinos de San Roque tiene ya listo todo para recibir a los miles de pacenses que cada año acuden al entierro de la sardina para despedir el Carnaval de Badajoz. Para los más madrugadores o quienes no se hayan acostado aún, a las 8.30 se repartirá aguardiente y perrunillas junto a la sede vecinal. También los cien primeros asistentes podrán degustar migas y café.

A las once de la mañana comenzará el desfile de la sardina, cuyo diseño se ha renovado para esta edición, y las comparsas (se han inscrito 18), grupos menores (5) y artefactos (una veintena). Saldrán desde el cruce de la avenida Ricardo Carapeto con la calle Alfonso XII y terminarán en la intersección con Juan Labrado. Se repartirán 2.000 euros en premios, entre los que se entregarán hoy y los que se concedieron ayer a las comparsas infantiles, que desfilaron por la tarde.

Una vez concluya el desfile, sobre las dos de la tarde, llegará el momento de degustar las tradicionales sardinas asadas, que se servirán acompañadas de pan y vino junto a la sede vecinal. Este año se han preparado 550 kilos de pescado, 150 barras de pan y 85 litros de vino, según explicó el presidente de San Roque, ramón Olivera, que hizo un llamamiento a todos los pacenses para que acudan a esta cita que marca el fin de los carnavales. «Pese a la previsión de agua, esperamos que la gente se anime y se salve la fiesta», confió.

Aunque cuenta con una subvención municipal, es la asociación de vecinos la que se encarga de organizar las distintas actividades, para las que también aporta fondos, según recordó su presidente.

Por la tarde, a las 19.30 horas, se entregarán los premios de los diferentes concursos del Carnaval del 2019 en el templete de la música del paseo de San Francisco. Ya solo quedarán 361 días para volver a disfrutar de una de las fiestas con más arraigo y más multitudinarias de la ciudad de Badajoz.