No esperábamos que el 2020 nos sorprendiera con una pandemia, palabra que a muchos nos sonaba tan extraña como lejana, pero llegó para instalarse entre nosotros y cada vez cercando más el círculo, caímos en ella mi marido y yo. Hemos pasado 9 días hospitalizados en la segunda planta, la planta del covid, del Hospital de Mérida. Desde aquí nos gustaría tener unas palabras de agradecimiento con todas las personas que han hecho una labor inmejorable en nuestro cuidado, desde los camilleros, celadores hasta los sanitarios propiamente dichos pasando por el personal de limpieza, de cocina, de ambulancias etc. A pesar de ser un matrimonio consolidado con más de 46 años de convivencia, hemos tenido que convivir estos días en la misma planta pero en distintas habitaciones, hecho que gracias a los teléfonos moviles y a saludarnos de ventana a ventana ha hecho más grata la convalecencia en el “banco de la paciencia”, como le llamábamos. Gracias de corazón por el cuidado que habéis tenido con nosotros, por las quejas atendidas, los ánimos, las palabras de apoyo, las numerosas pruebas médicas que habéis repetido hasta estar seguros que de alguna u otra manera nos encontrábamos ya en situación de volver a casa lo más favorablemente posible. Tenéis un equipo de una grandeza humana tremenda y cualquier agradecimiento se queda corto por haber hecho de la incertidumbre de nuestra estancia en el hospital de Mérida una esperanza de que se puede salir de esta enfermedad. Gracias al Servicio extremeño de salud por tener tan buenas personas al cuidado de nosotros.

Mérida, 12 de Noviembre de 2020

Firmado: Rosi Ceballo y Victor Romero. Mérida