Contaminación acústica

El ruido de mañana

César Asensio // Madrid

La gestión de la contaminación acústica en un municipio es un problema complejo. Para poder abordarlo de forma adecuada, debemos realizar una distinción básica: el ruido de hoy, frente al ruido de mañana. No podemos pretender dar una solución común a ambos problemas. No debemos ignorar el problema del ruido de hoy en las ciudades, y, desde luego, no podemos olvidarnos hoy del ruido de mañana.

En muchos ayuntamientos de los municipios de este país, mal que bien, tan solo se preocupan del ruido de hoy (y muchos dirán que lo hacen muy mal). A veces, a regañadientes, porque hay vecinos que, en su desesperación, se encargan de poner sobre la mesa el ruido que padecen hoy. A esos ayuntamientos debemos recordarles que la contaminación acústica va más allá de las molestias. Haya, o no, quejas, el ruido en las ciudades es un problema de salud pública (hasta lo dice la OMS, señores), y la solución debe empezar hoy. No debe esperar aunque nadie se queje. En los últimos 20 años se ha recorrido mucho camino, pero todavía queda mucho por recorrer. Integrar la acústica en la estrategia de ciudad y en la gestión municipal es fundamental. No solo para prevenir quejas (que también), sino para ganar salud. Mejorar la calidad acústica de la ciudad implica desprenderse de papeletas en la rifa del estrés y los problemas cardiovasculares, revalorizar la localidad, reducir costes sanitarios…

Empiecen hoy, alcaldes o alcaldesas, por favor.

Jardinería

Vergel que veremos

María Francisca Ruano // Cáceres

De lo que se ve o quiere verse se ve lo que se ve. Prestando atención. Pero, en algunos otros lugares, costas, centro, norte o sur, los jardineros, cada jardinero que no se conoce, pero que no es un desconocido precisamente, desde muchos meses antes, injertan, drenan, podan, abonan, esquejan, siembran terrenos de pensamientos, amapolas, celindas, dalias, hortensias, tulipanes o lirios, capuchinas: el vergel que veremos. Luego lo protegen , con paciencia y atención, en invernaderos acristalados o no, cálidos o fríos o helados. Y lo logran todo: rosales, rosas, rosa antigua, rosales trepadores que reposan y adornan los callejones de las callejueras de cuánto cautivo, de cuántas cadenas.