No soy experto en el tema ni lo pretendo, pero no es necesario profundizar mucho para saber que no hay que hacer leyes nuevas, ni cambiar la Constitución, ni nada excepcional. Basta con aumentar los años de cárcel, y tener la intención de prevenir y proteger a la mayoría, en el Código Penal, para que empecemos a protegernos de estas bestias que destrozan y matan mujeres o de aquellas otras que llevan la violencia --antesala de la muerte-- a poblaciones enteras, socapa de reivindicar derechos.

Soy de los que se siente abandonado por el estado. Pago impuestos desde que era un crío (gracias a Dios), madrugo casi todos los días de la semana. Trato de hacer mi trabajo lo mejor posible. Intento cumplir todas las normas, incluidas las que no me gustan. Y a cambio recibo, o muchachas violadas por individuos que no deberían haber salido nunca de la cárcel o individuos que amenazan a ciudadanos normales, queman mobiliario público, y otras «lindezas democráticas» por el estilo.

A mí me mandan cartas amenazándome de forma soez con «las penas del infierno», cuando cometen errores en Hacienda, y a los «otros» les buscan la reinserción desde el mismo momento en que cometen el delito, sin esperar siquiera que se arrepientan.