El español Alberto Contador se ha subido a lo más alto del podium del Tour de Francia como "el hombre más feliz del mundo", presto a cumplir un sueño de niño, escuchar el himno español en la capital francesa."Todos los sentimientos que tengo ahora son muy buenos, tenía ganas de experimentarlos en mi piel. Escuchar el himno español es lo máximo, es un sueño hecho realidad", ha asegurado el madrileño de Pinto, el quinto español en ganar el Tour.Contador ha afirmado que se sentía "en el paraíso" y ha dedicado el triunfo a su familia y a sus compañeros de equipo. "Es un día extraordinario para mi familia, mis padres y mi hermano", ha afirmado.Triunfar no era su objetivoEl ciclista ha confesado que la victoria final no era su objetivo en este Tour de Francia, donde había llegado con la intención de lograr el jersey blanco de mejor joven."No esperaba ganar un Tour tan pronto. Mi objetivo era ganar el jersey blanco pero no podía pensar que viniera con el amarillo", señaló.Contador ha evitado comparaciones con otros ciclistas, en particular con el estadounidense Lance Armstrong, que corrió en el mismo equipo."Las comparaciones no son siempre son buenas""Yo por el momento he ganado este Tour, ya veremos lo que pasa en el futuro, las comparaciones no siempre son buenas. Ahora sólo pienso en disfrutar de este triunfo y esta noche es seguro que lo vamos a celebrar", ha dicho.El madrileño ha tenido que contestar también a preguntas sobre los problemas cerebrales que estuvieron a punto de costarle la vida."Estoy marcado de por vida por esa operación de cerebro y eso también me permite saborear mejor estos momentos", ha señalado Contador, que también ha afirmado que la victoria "se saborea más" al haberla logrado "tras la etapa de infarto" de la víspera, cuando logró conservar 23 segundos en la general al término de la contrarreloj entre Cognac y Angulema en la que le pisó los talones el australiano Cadel Evans.